David Alaba reapareció en la ida de semifinales de la Champions League recién recuperado de unos problemas en el aductor derecho que le mermaron en el Etihad Stadium, alejado de su imagen en los dos primeros goles encajados por el Real Madrid, y fue sustituido en el descanso por Nacho Fernández.
Mientras que el brasileño Casemiro no forzó su reaparición, Alaba lo hizo para aguantar 45 minutos en el terreno de juego. El defensa austriaco estuvo desconocido en labores defensivas, falto de contundencia y su acción más destacada fue ofensiva, en un testarazo con el que rozó el gol en la primera llegada madridista.
Alaba tuvo que ser sustituido en el descanso por sus malas sensaciones y será revisado por los médicos madridistas para determinar si puede jugar el partido de vuelta de las semifinales, el próximo miércoles en el estadio Santiago Bernabéu.
Se fue sin cojear
Por lo pronto, las sensaciones no son negativas. Quedan siete días por delante para que el central austriaco se recupera del todo y el propio jugador hizo un gesto que revela sus sensaciones. Fue a la salida del Etihad Stadium, donde Alaba fue captado por algunos periodistas presentes en zona mixta.
A la pregunta sobre cómo se encontraba y si llegaba a la vuelta del miércoles 4 de mayo, Alaba respondía positivamente y levantaba el puño pareciendo dejar claro que no tendría problemas. A eso hay que sumar que se iba sin cojear.
El Real Madrid, que regresó de madrugada a Madrid, se volverá a entrenar el jueves. El sábado se mide al Espanyol en un encuentro en el que se podría proclamar campeón de Liga. Aún así, se espera que los blancos roten en su siguiente partido con la cabeza puesta en la Champions y Alaba es uno de los claros señalados para no saltar al césped.
El otro jugador sobre el que se centra la atención es Casemiro. Ancelotti prefirió que no jugará tras arrastrar molestias desde un entrenamiento posterior a la vuelta contra el Chelsea. El centrocampista fue duda hasta último momento en Mánchester y no debería tener problemas para estar disponible de cara a la segunda batalla contra el City.