El CD Toledo visita sin miedo al Fuenlabrada convencido de dar la sorpresa
El CD Toledo visita uno de los campos más complicados sin más remedio que intentar puntuar. No le queda otra al cuadro de Miguel Falcón, que se medirá a un Fuenlabrada que marcha en cabeza en el Grupo I de Segunda B y que es uno de rivales más difíciles a los que se puede medir en la categoría.
Y es que la situación de los verdes es preocupante, después de haber sumado un bagaje de un punto de los últimos seis disputados, con dos partidos en casa consecutivos ante el Cerceda y el Valladolid B que se saldaron con una derrota y un empate. Una cosecha pobre que ha dejado a los capitalinos momentáneamente en el puesto de promoción de permanencia y con la exigencia de tener que sacar algo positivo en donde sea.
Además, Falcón insiste en que su equipo ni siquiera puede firmar el empate en el Fernando Torres de Fuenlabrada por "la situación en la que estamos". Como nota positiva, asegura que confía en sus jugadores, porque "el otro día se pudo ganar". También se apoya en que "en los años anteriores hemos conseguido allí grandes resultados".
Cuatro bajas sensibles
Por lo que se refiere al apartado de bajas, no podrá estar sobre el terreno de juego Tomás Sánchez, que cumplirá su segundo partido de suspensión después de la sanción que recibió tras el choque frente al Cerceda. Asimismo, otros tres jugadores tampoco entrarán en la citación. Se trata de las ausencias conocidas de Adrián Riera y Álvaro Antón, este último encarando poco a poco el último tramo de su recuperación, y Lassad.
En el caso del atacante, se ha ido restableciendo, pero se quiere actuar con precaución con él para evitar que una recaída les obligue a los capitalinos a tener que olvidarse de él para lo que resta de temporada.
El partido con el Sanse, el viernes por la mañana
Por lo que se refiere al partido frente al Sanse en el Salto del Caballo, tanto el equipo madrileño como el CD Toledo han llegado a un acuerdo para que el partido se juegue el próximo viernes, a partir de las 12:30 horas. La idea es evitar la coincidencia con las festividades de Semana Santa y que no se merme demasiado la afluencia de público al feudo verde.