La UB Conquense se tuvo que conformar con salvar un punto de un partido en el que debió ganar. Y gracias, porque los blanquinegros vieron cómo el duelo frente al Badalona se les podía marchar a pesar de haber jugado buena parte de la segunda mitad con un hombre más. Sin embargo, un penalti en el descuento le permitió a Jairo Cárcaba establecer el 1-1 y pescar un empate que prácticamente se esfumaba. 

El choque comenzó con los típicos minutos de tanteo. Un intercambio de posesión que poco a poco dio paso a un mayor dominio de los blanquinegros. Jairo y Jorge fueron los primeros en intentarlo, sin demasiada fortuna, en un choque en el que los catalanes se empezaban a sentir cómodos en el papel de estar a la espera. 

Así se fue consumiendo el tiempo en una primera parte en la que el dominio local no se tradujo en ocasiones demasiado claras. Sólo Jorge Fernández, con una chilena que a punto estuvo de colarse en la portería del Badalona, pudo deshacer un 0-0 con el que se llegó al tiempo de descanso. 

Superioridad desaprovechada

En la segunda parte, llegaron pronto buenas noticias para el Conquense. Y es que el Badalona se quedó muy pronto con diez, en el minuto 56, por la doble amarilla de Marc Carbó. A partir de entonces, el papel dominador les correspondió por completo a los de Ayllón, que tuvo que ver el partido desde la grada en el primero de los cuatro encuentros con los que ha sido sancionado. 

A pesar de la superioridad, el Badalona se mostró muy ordenado, pudiendo incluso adelantarse tras una salida en falso de Marqueta. Por parte de los blanquinegros, sólo Jorge con un tiro desde lejos inquietó a la zaga visitante. Sin embargo, el mazazo estaba esperando al último minuto. En el 89, una mala entrega de More derivó en un contragolpe que terminó en las botas de Aly, quien enganchó la pelota a la perfección para anotar el 0-1. 

Parecía que el partido se les marchaba a los locales, pero entonces apareció una jugada salvadora para el Conquense en el minuto 92. El colegiado apreció un penalti sobre Adhibe, que motivó la expulsión de Albarrán, y Jairo se encargó de lanzarlo para establecer el 1-1 y salvar un punto en un partido que se debió ganar.