Dos de las pancartas instaladas por el Ayuntamiento de Yebes.
El pueblo que más crece de Castilla-La Mancha se siente abandonado por la Junta y se llena de pancartas reivindicativas
El municipio guadalajareño de Yebes y su núcleo de población Valdeluz, situados cerca de la capital provincial y de la Comunidad de Madrid, han experimentado un espectacular incremento poblacional en los últimos años. Pero, pese a ello, el Ayuntamiento liderado por el alcalde popular Enrique Quintana, considera que el Gobierno de Castilla-La Mancha tiene abandonada a la localidad.
Una situación que ha llevado al consistorio a instalar en distintos puntos muy visibles del pueblo varias pancartas de grandes dimensiones en las que puede leerse: "La Junta de Page se olvida de la Sanidad y la Educación en Yebes y Valdeluz".
Un llamativo método de denuncia contra el trato que proporciona el Gobierno castellanomanchego a Yebes y a Valdeluz que no va a ser el único que utilice el Ayuntamiento, que ya ha anunciado una serie de movilizaciones vecinales, marchas y actos de protesta con el objetivo de presionar al Ejecutivo autonómico liderado por el socialista Emiliano García-Page para que impulse infraestructuras básicas para los yeberos como un centro de salud o un instituto.
"Hemos intentado reunirnos con la Junta durante años, incluso ofreciendo pagar la adecuación del consultorio médico, pero seguimos sin respuestas. No podemos dejar a nuestros vecinos esperando en la calle para hacerse análisis ni a nuestros alumnos recibiendo clases en un comedor escolar", denunció Quintana recientemente tras la celebración de una reunión vecinal en el Auditorio del Edificio Multiusos de Valdeluz.
Sobre la necesidad de un instituto propio, el alcalde recordó que los alumnos de secundaria se ven obligados a recibir sus clases en la segunda planta del colegio del municipio, un espacio "completamente saturado".
Otra de las pancartas.
La población de Yebes y Valdeluz ha aumentado más de un 3 000 % en lo que va de siglo, marcando la mayor subida porcentual de Castilla-La Mancha. Hoy por hoy, allí residen más de 5 400 habitantes. El 1 de enero de 2000 eran solo 167 vecinos. Un boom que, según el Ayuntamiento, no se ha visto acompañado con las infraestrucutras y servicios básicos necesarios por parte de la Junta de Comunidades.
