Ajetreado fin de semana en el Cigarral de Marañón en Toledo e intervención final del Seprona
El pasado fin de semana fue intenso y ajetreado en el Cigarral de Menores de Toledo, propiedad de Gregorio Marañón y su familia. Tanto que al final, a instancias de la propiedad, tuvo que intervenir el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil y todo acabó bien, como debe ser.
La situación resultó un poco aparatosa, aunque se resolvió favorablemente gracias a la iniciativa del cigarral y la rápida y eficaz actuación de los agentes del Seprona.
Un grupo de cárabos se coló por la chimenea de la casa y, ante la imposibilidad de controlarlos, se dio aviso al citado servicio de la Benemérita, que este domingo rescató a los animales y pudieron posteriormente ser liberados.
El cárabo común es una rapaz nocturna de mediano tamaño que puede alcanzar una longitud de 40 centímetros, una envergadura de 90 y superar los 600 gramos de peso. Tiene forma rechoncha, con una gran cabeza y no posee penachos. Se encuentra entre las rapaces más frecuentes del continente europeo.
El plumaje es muy críptico con diferentes coloraciones entre individuos que nada tienen que ver con el sexo o la edad y que no cambian con el paso del tiempo. Podemos encontrar desde ejemplares grises hasta rojizos, pasando por una amplia gama de marrones intermedios.
La liberación de estos cárabos que se colaron por la chimenea del Cigarral toledano de Marañón fue un alivio para todos. Hay que felicitar al Seprona por su diligente actuación y rescate.