Digital Castilla

Digital Castilla

Región EL GOBIERNO DE PAGE RECHAZA EL NUEVO TRASVASE

La reapertura del trasvase del Tajo anunciada por Tejerina eleva la tensión política en Castilla-La Mancha

22 marzo, 2018 13:06

El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, ha asegurado este jueves que "Castilla-La Mancha también necesita el agua", a la vez que ha lamentado que el Gobierno de Mariano Rajoy haya resucitado el trasvase coincidiendo con el Día Mundial del Agua. El consejero ha afirmado que "es de sentido común que el agua tiene que generar desarrollo en todos los territorios, pero primero está la cuenca cedente" y ha recalcado que "los embalses de la cabecera del Tajo están al 16 por ciento".

El consejero de Agricultura, que ha inaugurado la empresa J.Toldos Reciclajes Manchegos de Pedro Muñoz (Ciudad Real), ha considerado que es "un día poco apropiado" para hacer anuncios como éste, cuando hace poco estábamos en una situación "extrema de sequía" en Castilla-La Mancha que "evidentemente, también nos afecta hoy". Según ha informado la Junta en un comunicado, ha insistido que "cualquier persona con sentido común se da cuenta que no se puede, ni se debe autorizar un trasvase" a la vez que ha recordado que hay recursos públicos "que se invirtieron en las desaladoras y que hoy no están al 100 por cien de funcionamiento".

"Basta ya de regates cortos en política para transmitir mensajes erróneos al conjunto de la ciudadanía", ha instado el titular de Agricultura en Castilla-La Mancha, quien ha explicado que "no se puede hacer política siempre con un trasvase y reducir el discurso político, exclusivamente, a reivindicar un trasvase que no va a resolver el problema y que es pan para hoy y hambre para mañana, también para el Levante". El Gobierno de Castilla-La Mancha, ha puntualizado Martínez Arroyo, pide que, en todo caso, "se garantice la preferencia de la cuenca cedente sobre otros usos".

Además, ha reiterado la mano tendida, para "llegar a un acuerdo en España entre todos", pero ha advertido de que "en Castilla-La Mancha vamos a defender con uñas y dientes el interés de los ciudadanos", haciendo hincapié en que "incluye a todos los partidos políticos de la región y a todo el tejido económico y social de Castilla-La Mancha, porque el agua que está en la comunidad autónoma tiene que ayudarnos primero aquí".

Reacción desde el PP

Por su parte, el portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular, Francisco Núñez, ha defendido este jueves, después de que la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, haya admitido que el Gobierno tiene previsto autorizar un nuevo trasvase del Tajo al Segura a partir del 1 de abril, que si hoy se habla de la posibilidad de trasvasar o no por encima de 400 hectómetros cúbicos en los pantanos de cabecera es gracias a la gestión de la expresidenta regional María Dolores de Cospedal, que logró elevar de los 240 hectómetros cúbicos esa línea mínima.

Así lo ha indicado el parlamentario popular, preguntado por los medios sobre la confirmación de un nuevo trasvase para el mes de abril, durante la rueda de prensa que ha ofrecido en las Cortes, donde ha insistido en que Cospedal "demostró con hechos" su defensa del agua para la región, frente al expresidente socialista José Bono, que en su día "vendió como un gran logro establecer la línea mínima en 240 hectómetros cúbicos" o el actual titular del Gobierno regional, Emiliano García-Page, "que en tres años no ha conseguido aun nada".

"Lo que tendría que hacer es trabajar por elevar ese caudal", le ha reclamado Núñez al presidente autonómico, que preguntado sobre si esos 400 hectómetros son insuficientes para el PP, tan solo ha pedido a García-Page que dé a conocer las medidas que tiene para garantizar los recursos hídricos de la región. "En tres años de gobierno no ha planteado aún ninguna propuesta para mejorar el uso del agua. Cospedal lo demostró con hechos. Page no ha hecho nada, solo quejarse, criticar y usar el agua como arma arrojadiza", ha criticado el diputado popular, que tras acusar al presidente castellano-manchego de "querer reabrir la guerra del agua", ha dicho que "demagogia y populismo en materia de agua, las justas".

A renglón seguido, y en el Día Internacional del Agua, ha afirmado que su partido quiere volver a la senda de un pacto nacional, que derogó el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero, que garantice agua en cantidad y calidad para el desarrollo agrícola, ganadero y económico de Castilla-La Mancha.

Preguntado sobre si hay más cosas que separan al PP del Gobierno regional en materia de agua de las que les acercan, Francisco Núñez ha asegurado que "es complicado" acercarse al presidente regional en este asunto. "El PP ya ha demostrado su defensa con hechos. Ahora le corresponde a Page y a Podemos indicar hacia dónde quieren llevar el pacto por el agua. Pero de momento no han puesto ni una sola solución, solo se dedican a criticar y a tratar de incendiar el debate público del agua para usar este tema como elemento de distorsión política para captar votos", ha concluido.

Reacción del PSOE

 

Por su parte, el diputado del Grupo Parlamentario Socialista Emilio Sáez ha lamentado este jueves la confirmación, por parte de la ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, de la ejecución de un nuevo trasvase del Tajo al Levante y ha dicho que al "igual que los buitres esperan a que muera el animal para agarrar su carne, han esperado a que los embalses de cabecera tuvieran 400 hectómetros cúbicos para volver a transferir agua a Murcia y Valencia".

Y es que en rueda de prensa, el parlamentario socialista ha criticado que la ministra haya realizado esta confirmación en el Día Internacional del Agua, "un día de celebración que se torna triste para Castilla-La Mancha", pues en lugar de defender en una jornada como esta a toda la ciudadanía, con esta decisión el Ejecutivo central "se posiciona con el Levante". "Podrían haber esperado a mañana y ser algo sensible con esta tierra", ha lamentado Sáez, que ha advertido de que, si el Ejecutivo central sigue haciendo "tropelías, seguirá incumpliendo lo pactado y siendo insensible a Castilla-La Mancha, única región que lleva cediendo agua desde hace casi 40 años en virtud de un acuerdo preconstitucional.

"Llevamos 40 años siendo solidarios y contribuyendo al desarrollo económico, agroalimentario y turístico del Levante español, que ha ido en detrimento de Castilla-La Mancha. Por eso nuestra obligación es defender los intereses de la región", ha dicho el diputado socialista, que ha criticado que el viceportavoz del PP, Francisco Núñez, haya eludido hablar sobre este asunto en la rueda de prensa que ha ofrecido de forma previa, y que hayan tenido que ser "los periodistas" los que le hayan sacado el tema, cuando se trata de una cuestión "clave" para la región.

Así, y tras lamentar que los populares "sigan justificando las tropelías cometidas desde el Gobierno Rajoy", les ha afeado que sean incapaces de "ponerse de acuerdo con el resto de partidos del arco parlamentario de la región para hacer una defensa unitaria del agua, como sí hacen en Murcia y Valencia". Sáez ha reclamado que se use agua de las balsas subterráneas del subsuelo, que empiecen a funcionar al 100 por 100 las depuradoras y mejorar la eficiencia de los regadíos para "no tirar de la única vaca que ofrece agua en este país, que es el trasvase del Tajo al Segura".

Luego de criticar que Tejerina diga que los trasvases se hacen por "consenso", cuando Castilla-La Mancha lleva reclamando 32 meses poder estar en la Comisión de Explotación que los decide, ha pedido que también se hagan trasvases en las demás cuencas como, ha dicho a modo de ejemplo, en la del Ebro, "donde al año se pierden 300 hectómetros de agua que en un trasvase lineal podrían ir al Levante". "En siete años de gobierno, Rajoy no ha hecho nada por solucionar el problema del agua, tan solo ejecutar 23 trasvases, siete de ellos por debajo del límite trasvasable que había puesto el PP", ha asegurado Sáez, que ha defendido que cuando el expresidente José Bono defendió que los 240 eran buenos para la región "los embalses de cabecera estaban al 75-80 por ciento y nadie pensó que se alcanzarían los niveles de sequía" a los que se ha llegado.