En la Junta creen que la jornada de 35 horas de los funcionarios no acarreará problemas de servicio
El vicepresidente primero del Gobierno de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, no cree que vaya a haber "problemas de organización" a la hora de implantar la jornada laboral de 35 horas a partir del 1 de enero en el sector público de la Junta de Comunidades.
Así ha reaccionado Martínez Guijarro después de que la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) haya pedido negociar "con urgencia" las instrucciones de jornada para "evitar un caos organizativo" con esta nueva jornada laboral aprobada este jueves. Ha explicado que los responsables de recursos humanos de cada uno de los centros tienen ahora que establecer la reordenación a partir del 1 de enero de los correspondientes turnos y profesionales que prestan servicio para la Junta ajustando la jornada a las 35 horas.
Según ha recordado el vicepresidente primero el Ejecutivo autonómico, esto ya se hizo cuando se produjo la anterior aprobación e implantación de las 35 horas "con absoluta normalidad".
En los centros de 24 horas
Así, el vicepresidente ha reconocido que la implantación tiene especial dificultad en los centros que prestan servicio 24 horas al día 365 días al año, es decir, en hospitales y centros residenciales que atienden a personas mayores o a personas con discapacidad.
Dicho esto, ha añadido que cuando se hizo la anterior implantación de las 35 horas se produjo un incremento de las plantillas en estos centros que, y una vez que fue suspendida la aplicación por el Tribunal Constitucional, se decidió mantenerlas, con lo cual "entendemos que no hay ninguna dificultad" en este sentido, ha abundado.
Finalmente, ha incidido en que la implantación de las 35 horas no tiene por qué tener especial repercusión en el cumplimiento de los objetivos de déficit. "Al haber mantenido las plantillas durante todo este tiempo, entendemos que no es necesario hacer una especial incorporación de profesionales en estos momentos", ha argumentado.