Castilla-La Mancha, entre las regiones de la Unión Europea en riesgo por la fuga de cerebros

La Comisión Europea ha propuesto un mecanismo de retención y atracción del talento que preste apoyo técnico a las 82 regiones de la Unión Europea más afectadas por la fuga de cerebros, entre las que encuentra Castilla-La Mancha, además de Castilla y León y Extremadura.

La vicepresidenta europea de Demografía y Democracia, Dubravka Suica, y la comisaria para Cohesión y Reformas, Elisa Ferraira, ha presentado la iniciativa este martes junto al informe de 2023 sobre el impacto del cambio demográfico, que revela el fuerte descenso de la población activa con una reducción de 3,5 millones de personas entre 2015 y 2020, mientras que se espera la pérdida de otros 35 millones de personas de aquí a 2050.

"Un total de 16 Estados miembro está gravemente afectado por el descenso de la población activa, un bajo porcentaje de titulados universitarios y de enseñanza superior o una movilidad negativa de su población de 15 a 39 años, una trampa de desarrollo del talento".

Este nuevo proyecto piloto para ayudar a las regiones que se enfrentan a este reto a elaborar, consolidar, desarrollar y aplicar estrategias adaptadas y globales. Así, prestará ayuda a las regiones con mayores tasas de abandono de sus jóvenes a adaptarse a la transición demográfica e invertir en el desarrollo del talento mediante políticas adaptadas a cada territorio.

Instrumento de Apoyo Técnico

En otro sentido, el Instrumento de Apoyo Técnico (IAT) dará respaldo a los Estados miembros, previa solicitud, con reformas a nivel nacional y regional, necesarias para hacer frente a la disminución de la población en edad activa, la falta de empleo y el desempleo. Así, en el marco de la Iniciativa Urbana Europea, se lanzará una nueva convocatoria de acciones innovadoras.

Se dará también especial importancia al intercambio de experiencias, por lo que se habilitará una web específica que recoja la difusión de buenas prácticas y que ofrezca a las regiones la posibilidad de crear grupos de trabajo para abordar retos profesionales o territoriales. Ante el problema, Bruselas ha planteado el uso de fondos e iniciativas de la Unión Europea existentes para apoyar a las regiones más afectadas por la transición demográfica.