Varias carreteras permanecen cortadas en Ciudad Real por las lluvias, desprendimientos y balsas

Pese a que ya no hay avisos vigentes en Castilla-La Mancha por la borrasca Nelson, sus efectos no terminan de marcharse y aún existen problemas en las carreteras de la provincia de Ciudad Real, algunas de ellas todavía cortadas, por las abundantes lluvias de los últimos días, intensas también a lo largo de este domingo y lunes.

La borrasca Nelson se ha dejado sentir de manera muy notable en la provincia de Ciudad Real y, como ha venido informando EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM, el fin de semana ha dejado la mayor crecida del Guadiana en la localidad de Puebla de Don Rodrigo, así como distintos problemas en las carreteras y desembalses.

El temporal de lluvia y viento que ha afectado a buena parte del territorio nacional ha cruzado la geografía ciudadrealeña con abundantes precipitaciones que han afectado a la Red Provincial de Carreteras, dependiente de la Diputación, en forma de desprendimientos de taludes, formación de grandes balsas de agua y cortes por desbordamiento.

Carreteras cortadas

El 112 de Castilla-La Mancha, según información facilitada por mantenimiento de carreteras de la Diputación de Ciudad Real, ha informado de que están ya abiertas al tráfico la CR-412, de Los Pozuelos de Calatrava hacia la CM-4112; la CR-7211 y la CR-7121.

Como consecuencia de las lluvias caídas en las últimas horas, continúan cortadas otras dos carreteras ciudadrealeñas. Se trata de la CR-413, en Los Pozuelos de Calatrava; y la CM-4114, en el kilómetro 26, en Malagón. En nivel amarillo se encuentran la CR-7224, la CR-713 y la CR-711.

Esta circunstancia no afecta a los desplazamientos entre poblaciones porque, afortunadamente, existen varias rutas alternativas. Así lo ha destacado la pasada noche el presidente de la institución provincial, Miguel Ángel Valverde, quien ha remarcado que se trabaja para que la situación vuelva a la normalidad lo antes posible.

Persisten los problemas en la provincia de Ciudad Real

Valverde ha destacado el trabajo de los responsables técnicos y de las brigadas de la Diputación, que han venido interviniendo desde el inicio de la Semana Santa, aunque ha sido a partir de Jueves Santo cuando se han llevado a cabo la mayoría de las intervenciones, tal como ha informado puntualmente nuestro periódico a lo largo de los últimos días.

Trabajo intenso

El jefe del Departamento ha coordinado al personal de ingeniería, a las brigadas y al personal de maquinaria de conservación y ha estado en permanente comunicación con el vicepresidente responsable del Área de Atención a Municipios y su Departamento de Vías, Obras, Infraestructuras y Medio Ambiente, Miguel Ángel Ruiz Rodríguez. Se han atendido una treintena de incidencias en el conjunto de la provincia en diferentes comarcas.

Durante el Jueves y el Viernes Santo las brigadas se centraron principalmente en emergencias derivadas de las intensas lluvias caídas en las zonas de Conservación de Almadén y de los Cortijos, en las proximidades de El Robledo. Se llegó a tener cortadas, de forma puntual, un total de 6 carreteras, la CR-4145, CR-4143, CR-4192 y la CR-413, todas ellas en la comarca de Almadén. Y la CR-7211 y la CR-7221 del área de los Los Cortijos.

Balsas de agua y desprendimientos

Por otro lado, las incidencias se acumularon en los caminos municipales de Saceruela a Valdemanco y de Saceruela a Agudo y Puebla de Don Rodrigo, así como de Casa Palillos, en el Parque Nacional de Cabañeros, a Pueblo Nuevo del Bullaque, debido a la persistente lluvia acumulada. Se procedió a apoyar con señalización preventiva. Y la atención se organizó con dos brigadas de conservación, la de Almadén y la de Los Cortijos, a las que se sumaron operarios de maquinaria pesada, sumando un total de 15 trabajadores. Durante el Sábado Santo y ayer, Domingo de Resurección, se ha sumado la zona de Mestanza, Solanilla del Tamaral y San Lorenzo de Calatrava.

Numerosos incidencias en la provincia de Ciudad Real en Semana Santa

Desprendimientos

Debido a la orografía montañosa, se han producido algunos desprendimientos de taludes de desmonte. Ha sido necesario realizar tareas de limpieza de calzadas y señalizar para advertir a los conductores del peligro de derrumbe existente.

Se ha optado por esperar a la remisión del temporal para proceder a una mejor valoración de los daños y plantear las actuaciones con una organización del operativo que se establecerá en los próximos días, aseguran desde la Diputación ciudadrealeña.

No obstante, la institución provincial mantiene una constante vigilancia de la evolución de los arrastres producidos. Del mismo modo, se ha intervenido en la zona de conservación de Torrenueva, donde se han detectado varias incidencias por existencia de balsas de agua y desprendimientos. Se han sumado al operativo un total de 18 trabajadores en las cuatro zonas atendidas durante el fin de semana.