Román tiene tomada la decisión sobre su futuro si no repite como alcalde de Guadalajara
El actual alcalde de Guadalajara y candidato por el PP a la reelección, Antonio Román, se muestra con ganas e ilusión de gobernar otros cuatro años pero tiene claro que si no logra la Alcaldía no seguirá como concejal.
"Fue unas de las condiciones que puse a mi partido cuando me insistieron en cambiar mi decisión de abandonar la política y que volviera a presentarme", señala en una entrevista a Efe Antonio Román, alcalde de Guadalajara desde 2007 y también senador electo del PP por Guadalajara.
Asegura que si no fuera elegido abriría un "periodo de reflexión personal" y se replantearía su futuro a medio plazo, pero afirma que seguiría en política de un modo u otro, ya que considera que si no forma gobierno no tendría sentido seguir en la oposición en el Ayuntamiento de Guadalajara, porque "habrá terminado un ciclo después de 24 años y 12 de alcalde".
"Creo que tendrá que haber personas que en la oposición puedan aportar más y deba renovarse, pero espero que eso no se produzca", confía.
Román afirma tener ganas e ilusión para seguir al frente del Ayuntamiento, aunque reconoce que es "un cargo absorbente, que desgasta y que tienes que tomar decisiones", pero al mismo tiempo "va iluminando, porque cada día ves cosas nuevas que hacer en la ciudad"; por ello concluye que ser alcalde es "de los cargos más intensos, pero también son de los que más llenan".
Defiende que su mejor aval para refrendarle en un nuevo mandato son los logros conseguidos a lo largo de estos años y recuerda algunos como la implantación de la Smart city y su apuesta por el deporte o una gestión eficiente del agua.
A su favor destaca además que no es un desconocido, ya que "las personas, en un momento de incertidumbre como el que hay actualmente, tienen la oportunidad de apostar por ti porque saben cómo gestionas, con honestidad" y reivindica que, más allá de que algunas personas no vean sus propuestas satisfechas, en el conjunto global se define como un "político honesto, honrado en la gestión personal y eficiente en la gestión".
De lograr el refrendo de la mayoría de los votantes el próximo 26 de mayo, Román tiene claras sus prioridades y lo primero sería tratar de tener un presupuesto municipal; en segundo lugar, organizar las fiestas y en tercer lugar, poner en marcha un plan de choque de limpieza.
También entre sus propuestas electorales están la recuperación de la cárcel provincial para desarrollar bien un centro residencial y de ocio para universitarios o para mayores; la recuperación del Fuerte de San Francisco para convertirlo en un museo y centro cultural; la recuperación de la antigua cárcel de mujeres para hacer de centro de familia en el casco histórico y, en el plano deportivo, hacer una nueva piscina cubierta en la zona de Fuente de la Niña.
Además, de cara a posibles pactos tras el 26 de mayo, Román los afronta desde el "conocimiento, la experiencia y la capacidad de llegar a acuerdos" y estaría dispuesto a negociar con todos los partidos como, recuerda, ya lo hizo en 2015, primero con PSOE, luego con Ahora Guadalajara y por último con Cs.
Considera que la experiencia de haber sido alcalde "muchos años" y conocer los problemas del Ayuntamiento y las ciudad le lleva a una "posición privilegiada para poder entablar diálogo con cualquier fuerza política", señala y apunta que salvo el candidato de Unidas Podemos, el resto no tiene experiencia municipal y si ganan, existe la posibilidad de que "Guadalajara se ralentice durante un tiempo".