Un detenido por tráfico de drogas en la localidad toledana de Olías del Rey
La Policía Nacional ha detenido a diez hombres y una mujer por supuesto tráfico de drogas, tras una operación en la que se han registrado cinco domicilios en Cáceres y otro en Olías del Rey (Toledo) en los que se incautaron de 1.960 gramos de marihuana, entre otras sustancias.
Según ha informado la Policía Nacional, fruto de los registros, llevados a cabo el sábado y el domingo pasado, los agentes aprehendieron 164 gramos de cocaína, 1.960 de marihuana, 3,22 gramos de speed y 120 gramos de sustancia de corte.
De los once detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública, pertenencia a organización criminal, falsedad documental y amenazas, varios tienen antecedentes penales.
Cinco de los detenidos fueron puestos a disposición judicial una vez finalizada la tramitación de las diligencias y la autoridad judicial ha decretado el ingreso en prisión de tres de ellos.
Además se intervinieron una presa hidráulica preparada para hacer paquetes de 500 gramos, documentos de identidad falsos, munición de arma corta, tres vehículos y 8.500 euros en efectivo.
Uno de los grupos más activos en Cáceres
La Policía Nacional ha asegurado que, de este modo, se procede a la desarticulación de "uno de los grupos criminales más activos" en la ciudad de Cáceres en esta actividad.
La investigación comenzó hace varios, al conocer la existencia en Cáceres de un grupo organizado presuntamente dedicado a la compra y distribución, a mediana y pequeña escala, de diversas sustancias estupefacientes, tanto en la capital cacereña como en provincias colindantes.
Tras las primeras diligencias los agentes consiguieron identificar al presunto cabecilla del grupo y, a partir de ahí, lograron identificar al resto de los componentes, así como las funciones de cada uno, la manera de actuar que tenían y los domicilios donde vendían y "apalancaban" la sustancia estupefaciente.
El cabecilla era el encargado de comprar la droga, así como de blanquear posteriormente el dinero obtenido con la venta de la misma.
Por debajo de éste, dos de los detenidos transportaban, ocultaban y distribuían la droga entre los "vendedores" del grupo, que la vendían en pequeñas cantidades en distintas viviendas repartidas por la ciudad.
Por último, otros dos de los detenidos se encargaban de ajustar las cuentas y cobrar las deudas a los clientes que no pagaban las mismas.
Tras obtener los indicios y pruebas necesarias, con la colaboración del Grupo de Estupefaciente de la Comisaría Provincial de Toledo, se llevaron a cabo los registros domiciliario en Olías del Rey y en otros cinco puntos de diferentes barrios de la ciudad cacereña.