El arzobispo de Toledo entra en campaña para que los escolares elijan la asignatura de Religión
El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, se ha sumado a la campaña 'Me apunto a Religión' difundida en Internet y en redes sociales, destacando que esta materia no es una sesión de Catequesis y poniendo en valor que "es útil" para que los escolares conozcan la sociedad en la que viven, cuenta con "buen profesorado" que sirve para conocer sus tradiciones y su cultura y "desea tratar a los alumnos como personas que necesitan una educación integral".
A su juicio, según su escrito semanal recogido por Europa Press, los obispos invitan "a los padres católicos a favorecer la educación religiosa de sus hijos, sin que las dificultades que puedan encontrar en sus hijos o en el centro sean un obstáculo a la hora de apuntarles a la asignatura de Religión".
Señala el primado toledano que escogen libremente la Enseñanza Religiosa Escolar 3,5 millones de alumnos y unos 30.000 profesores de Religión realizan esta misión educativa encomendada por los padres con una capacitación profesional del mismo nivel que se exige al resto de sus compañeros, profesores en otras asignaturas. Del número de profesores de Religión, el 35% realizan esta actividad en centros públicos y el 65% en centros concertados y aún privados. "Que no se engañen, pues, los padres como si Religión fuera una opción minoritaria", ha afirmado.
Considera que no son cifras para nada despreciables, tanto de alumnos como de profesores; "estos últimos en ocasiones son poco apreciados por sus compañeros en centros públicos, aunque tantas veces son apreciados por su valía personal y profesional".
También dice que los padres o los alumnos que eligen la clase de Religión optan por una asignatura bien preparada, necesaria por que "el mundo necesita igualmente de nociones precisas y claras sobre la fe cristiana, pero sin cerrarse a aludir a otros hechos religiosos no cristianos que conviven en este mundo". "El llamado hecho religioso es de enorme importancia, y no puede arrinconarse en el ámbito privado de la persona, porque esta postura no es real", ha afirmado.
Sitúa esta materia como "un tema importante en la vida de niños, adolescentes y jóvenes; necesario en una sociedad plural, que respeta la libertad personal, pero que no identifica a ésta con el gusto o la apetencia del momento". "El contenido de la clase de religión y moral católica, como también se puede denominar, es razonable, pero no racionalista. Y sirve para la vida, para esta vida concreta que estamos viviendo", ha concluido.