El Ayuntamiento de Móstoles respalda a la Policía tras el desalojo de una mujer negra vecina de Toledo
La concejal de Seguridad de Móstoles, Beatriz Benavides, ha defendido la actuación de la Policía Municipal cuando el pasado sábado desalojó a una mujer negra y a su hijo de cuatro años, vecinos de Camarena (Toledo), de un autobús urbano "por exceso de aforo", después de que esta se negara reiteradamente a abandonar el vehículo.
Benavides ha asegurado que "los agentes actuaron de forma correcta tras insistir durante noventa minutos a la mujer para que bajara del autobús" y que "no hubo racismo de ningún tipo" en la actuación policial, respaldando el comunicado conjunto que este lunes emitieron los sindicatos policiales.
En ese comunicado, los sindicatos afirman que "había muchas más personas en la parada que se tuvieron que bajar del autobús, entendiendo los motivos, excepto estas dos personas," y que su intervención fue "ajustada a derecho", por lo que "no se trata de un acto racista, machista o similar".
Según denunció este lunes SOS Racismo y tal como ha venido informando EL DIGITAL, la mujer, natural de Guinea Ecuatorial, pretendía coger el autobús en Móstoles para volver a su casa en Camarena (Toledo), donde vive con su hijo, pero el conductor trató de impedírselo porque no había asientos libres en el vehículo y no esta permitido viajar de pie.
Billete comprado
Desde SOS Racismo insisten en que la mujer había comprado, con tiempo, un billete de ida y vuelta para ella y su hijo, ya que ese trayecto, que sale desde la estación de Méndez Alvaro y pasa posteriormente por Móstoles, suele ser uno de los más concurridos, pero al llegar al autobús, a las 20.15 horas, ya venía completo.
Sin embargo, en declaraciones a Telemadrid, la edil de Seguridad ha explicado que, es cierto que "la mujer llevaba billete de ida y vuelta", pero que "lo llevaba abierto", por lo que a la hora de subir al autobús, éste se encontraba completo y el conductor no permitió que viajara de pie, ya que lo prohíbe el reglamento.
Al no querer abandonar el autobús, el conductor se vio obligado a llamar a la Policía Municipal, que tras llegar a la parada, en la Avenida de Portugal, trató de convencer a la mujer de que accediera a bajarse del vehículo, pero, tras la negativa de esta, los agentes tuvieron que bajarla a la fuerza.
"Los agentes actuaron de forma correcta tras insistir durante noventa minutos a la mujer para que bajara del autobús", ha añadido la concejal de Seguridad, respaldando nuevamente el trabajo de la Policía Municipal, que afirma que se ha "falseado y distorsionado la información con el objeto de crear una polémica donde no la hay".
Hechos grabados
Los hechos fueron grabados por otra viajera con su teléfono móvil y en el vídeo, que ha sido difundido por la asociación en redes sociales, se aprecia como la mujer cae por las escaleras directa al suelo en un intento por resistir a los empujones de la policía, que siguen tirando de ella hasta desalojarla del autobús.
Una vez fuera del autobús, se observa como los agentes -hasta ocho, según los testigos-, zarandean a la mujer e intentan reducirla con muchas dificultades, ya que la mujer insiste en volver a subir al autobús, llegando a enfrentarse a los agentes con la ayuda de otro hombre, supuestamente su hermano.
"No vamos a consentir que se difame a estos agentes ni a la Policía Municipal de Móstoles", reiteran desde los sindicatos policiales, quienes avanzan que "se va a estudiar emprender acciones legales" contra quienes difundieron la noticia "por injurias y calumnias" y "contra la autora del vídeo por el uso que ha hecho de las imágenes".