Incidencias en Toledo: menores ebrias y pelea en el Parque de las Tres Culturas

El concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Toledo, Juan José Pérez del Pino, ha informado este lunes de la relación de denuncias interpuestas por la Policía Local durante el pasado fin de semana con motivo de incumplimientos derivados del Estado de Alarma.

El total de denuncias asciende a 36 y, entre ellas, se incluyen dos por entrada en el término municipal a dos ciudadanos italianos, ocho denuncias por botellón, seis más por sobrepasar el toque de queda, tres por la mascarilla y otras 17 por reuniones de más de seis personas.

Además, Pérez del Pino ha informado de cuatro resultados positivos por alcoholemia desde el pasado viernes que derivaron en tres sanciones administrativas y una penal.

Botellón en laPiedra del Rey Moro

Además, el pasado sábado sobre las 21:00 horas, la Policía Local fue alertada de la congregación de un gran número de jóvenes en las inmediaciones de la Piedra del Rey Moro haciendo botellón y sin usar mascarillas.

Una vez en la zona, los agentes encontraron a más de 50 jóvenes entre las rocas y encinas y se logró identificar a varios de ellos. En el paraje, tras la supervisión de la zona, se observaron numerosos restos de bebidas, hielo, comida, etc.

Ese mismo día, sobre las 19:40 horas, la Policía Local atendió un aviso en la calle Alfonso Loarte de La Legua alertando de que una menor que se encontraba en la vía pública al parecer inconsciente. Una vez en el lugar, se verificó que la joven se encontraba estado de embriaguez pero consciente. Otra de sus acompañantes fue trasladada al Hospital Virgen de la Salud también por intoxicación etílica grave.

El domingo, sobre las 21:15 horas, la Policía Local también intervino en una reyerta registrada en el Parque de las Tres Culturas. Una vez allí se identificó a un individuo que presentaba heridas en el rostro y que manifestó haber sido agredido por otro hombre que fue posteriormente localizado en el Puente de San Martín.

Los agentes procedieron a su filiación y sus datos quedaron a disposición del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), pendientes de la valoración de las lesiones del agredido que, en principio, no revestían gravedad.