Imagen de archivo de la A-42 en la comarca de La Sagra.

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Toledo

Invierten 1,4 millones de euros en reducir el ruido de la A-42 a su paso por tres pueblos de Toledo

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El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha anunciado la adjudicación de las obras para reducir el ruido que genera la A-42, autovía que une Toledo y Madrid, a su paso por los municipios toledanos de Yuncos, Numancia de la Sagra y Yuncler por 1,4 millones de euros.

Según ha detallado la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha en un comunicado, esta actuación corresponde a la instalación de 996 metros de pantallas acústicas en la margen derecha de la vía entre los kilómetros 42,16 y 42,616, y en la margen izquierda entre los km 44,272 y 44,835.

Con la instalación de estos elementos, se busca una reducción de la contaminación acústica que sufren los vecinos de la urbanización Cervantes en Yuncos y las urbanizaciones Los Sauces e Idarsagra en Yuncler. 

En concreto, las pantallas acústicas se dispondrán en el margen derecho de la A-42 entre los kilómetros 42,16 y 42,616, con una longitud total de 452 metros y una altura aproximada entre 3 y 5 metros y en el izquierdo entre los kilómetros 44,272 y 44,835, con una longitud de 544 m y una altura aproximada entre 3 y 5 metros. En ambos tramos, las pantallas se ven interrumpidas en los kilómetros 44,35 y 44,554 para dar acceso a las calles Sauces y Madrid, respectivamente.

En cuanto a los paneles que se instalarán serán de dos tipos: metálico fonoabsorbente de 4 metros de longitud y de polimetacrilato transparente también de 4 metros de longitud. 

Estas obras, incluidas en el Plan de Acción contra el Ruido en la A-42, están financiadas a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, dentro del capítulo de sostenibilidad, eficiencia energética y acción contra el ruido de la Red de Carreteras del Estado, y sirven para dar cumplimiento a lo establecido por el Parlamento Europeo y el Consejo sobre evaluación y gestión del ruido ambiental, que fija una serie de objetivos entre los que destaca la creación de un marco común para la evaluación y gestión de la exposición al ruido ambiental.