Así serán todas las bibliotecas de Castilla-La Mancha en el futuro

El recién constituido Consejo de la Lectura y Bibliotecas de Castilla-La Mancha ha aprobado este viernes el Mapa de Bibliotecas, una herramienta de planificación revisable que determinará cómo tienen que ser las mismas en base a los tramos de población de los municipios que las integran.

Así lo ha explicado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Ángel Felpeto, antes de la constitución del Consejo de la Lectura y Bibliotecas de Castilla-La Mancha, ha informado la Junta en una nota de prensa.

Este Mapa persigue el objetivo de distribuir "en tramos poblacionales" la totalidad de los municipios de la región y, en función de dicha población, "determinar los recursos" --colecciones, condiciones de apertura al público, personal, espacios y equipamiento-- que las bibliotecas públicas necesitan.

Para la elaboración se partió de datos estadísticos a partir de los cuales la Consejería creó un grupo de trabajo compuesto por profesionales bibliotecarios a fin de concretar una propuesta de estándares que permitiesen con posterioridad la redacción del borrador inicial.

El estándar, entendido como modelo o referencia, define el requerimiento mínimo que debe ofrecer el servicio bibliotecario en el municipio para un indicador dado en su tramo de población correspondiente. Así, la propuesta fue sucesivamente valorada en la Comisión Técnica de la Red de Bibliotecas quien a su vez realizó aportaciones hasta alcanzar el documento final.

Finalmente, se han trasladado los conceptos de los estándares a cada uno de los municipios de la región conformando en sí mismo este Mapa de Bibliotecas de Castilla-La Mancha.

El contenido será accesible en los próximos días para todos los interesados a través de la web de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

Consejo

En relación al Consejo de la Lectura y de Bibliotecas de Castilla-La Mancha, Ángel Felpeto ha explicado que la constitución de este órgano "es un paso más" en el desarrollo de la Ley de la Lectura y las Bibliotecas, una norma aprobada en 2011.

Además, ha concretado que está formado por 15 representantes de la administración y las bibliotecas y tiene como funciones la coordinación y el fomento de la cooperación entre los diferentes centros e instituciones integrantes del Sistema de Bibliotecas de Castilla-La Mancha.