El animal más temido del mundo está 'a punto' de desaparecer: según los expertos solo quedan 15 años
Apenas quedan veinte mil ejemplares en libertad y únicamente cuatro mil de ellos son machos, un descenso global del 50% en los últimos 25 años.
3 septiembre, 2024 12:37El león africano es posiblemente la especie más simbólica del mundo animal. Con un aspecto majestuoso e imponente, su apodo como el 'rey de la selva' nos indica su importancia en África y en la sabana; sin embargo, su papel en los lugares en los que existe no solo cumple una función emblemática, sino también crucial para el equilibrio del ecosistema.
Al encontrarse en lo alto de la cadena trófica, no se enfrenta a depredadores naturales. Desempeñan un papel fundamental en el mantenimiento de ecosistemas saludables, ya que conservan un número equilibrado de herbívoros, como cebras y ñus. Sin embargo, y a pesar de que durante toda la historia hayamos pensado lo contrario, el león sí tiene un enemigo: el ser humano.
La población del león ha disminuido en un 90%. El 'rey de la selva' está a punto de ser destronado, y cada vez son más los expertos que luchan por parar la catástrofe que se aproxima. Si los números de ejemplares no aumentan, se estima que en solo 10 o 15 años el mundo no verá más a este animal.
El león, a punto de desaparecer
La situación de los leones en la actualidad es alarmante y su existencia en la naturaleza se encuentra en grave peligro. En 1800 se calculaba que eran 1.200.000 en todo el mundo y hace apenas un siglo, la población de leones en África superaba los 200.000 ejemplares, una cifra que se ha reducido drásticamente en las últimas décadas.
Actualmente, según la Lista Roja de la UICN, solo quedan entre 20.000 y 23.000 leones en todo el continente africano, una disminución del 50% en los últimos 25 años que indica la desaparición del 90% de su población en un siglo y que, además, se encuentra extinguido en 26 países, según WWF.
Esta disminución dramática en la población de leones se debe a una combinación de factores que afectan directamente a su hábitat y supervivencia. Entre las principales amenazas se encuentran la pérdida de hábitat natural debido a la expansión agrícola, la caza furtiva, el conflicto con los humanos y la disminución de sus presas naturales.
Tan solo una familia de leones —que pueden incluir hasta tres machos, una docena de hembras y sus crías— necesita hasta 160 kilómetros cuadrados de territorio para conseguir alimentarse. Y necesita, además, poder mezclarse con otros grupos para que la consanguinidad no degrade paulatinamente las siguientes generaciones.
La caza furtiva es una de las grandes amenazas. España es el primer país europeo en el ranking de caza de leones, y el segundo en el mundo, solo superado por Estados Unidos, de acuerdo con los datos de BIOPARC. Su piel, cabeza, garras, dientes e incluso su grasa, son comercializados como objetos de lujo que pasan a ser exhibidos en paredes o transformados en bisutería.
Además de forma decorativa, este animal también es valorado en algunas gastronomías del mundo. El vino elaborado con huesos de tigre es símbolo de estatus social en algunos países asiáticos está siendo sustituido en los mercados negros por el vino fabricado con huesos de león.
En los tres años transcurridos entre 2008 y 2011, según la WWF, se exportaron más de 1.160 esqueletos de leones procedentes de Sudáfrica, lo que supuso la caza de más de un ejemplar cada día. Unos datos que tratan de eliminar desde la web nombrada con la recogida de firmas para prohibición del tráfico ilegal.
La conversión de tierras salvajes en zonas agrícolas ha fragmentado los territorios de los leones, limitando su capacidad para cazar y reproducirse. Añadido al gran descenso de las presas de los leones, que consigue que estas especies recurran al ganado de los humanos en busca de alimento.
Este acercamiento supone un gran peligro para el animal, y es que cada vez es más común el envenenamiento de ejemplares por alimentarse del ganado de diferentes tribus. En 2018, el veneno como los pesticidas era la gran 'amenaza' de África, que acabó con centenares de leones.
Los esfuerzos de conservación han sido intensos, pero hasta ahora insuficientes para revertir esta tendencia preocupante. Se han establecido reservas y parques nacionales para proteger a los leones y su hábitat, pero estos esfuerzos a menudo se ven socavados por la falta de recursos o la corrupción.
La protección efectiva de los leones requiere no solo la creación de áreas protegidas, sino también el desarrollo de estrategias de conservación que involucren a las comunidades locales, promoviendo la coexistencia entre humanos y leones y proporcionando alternativas económicas que no dependan de la destrucción de hábitats naturales.