Así es la medida implantada en algunas zonas de España para frenar la sequía: la solución son las vacas
En España, Queserías Entrepinares puso en marcha la medida, con la cual consigue reducir en un 30% el consumo de agua.
17 septiembre, 2024 12:19La sequía en España es una realidad cada vez más preocupante. Pese a precipitaciones caídas en períodos concentrados de tiempo, el 2024 sigue siendo un año hidrológico seco, que continúa en una situación prolongada de la falta de agua, especialmente en Cataluña y, en general, en las provincias bañadas por el Mediterráneo y en Canarias.
Según datos del Observatorio Europeo de la Sequía, EDO (European Drought Observatory), España y Portugal son a día de hoy los dos países más afectados por la sequía. Sin embargo, la situación en todo el continente es preocupante, como reflejan los indicadores del Observatorio Europeo de la Sequía: el 47 % de su territorio está en prealerta y el 17 %, en alerta.
Debido a los datos, diferentes países europeos están tomando medidas. Una de las más innovadoras está desarrollada en la ciudad francesa Saint-Malo. Lejos de ser una prevención tecnológica como las que hemos visto hasta ahora, la solución proviene de las vacas: deshidratar su leche.
'Agua de vaca' para frenar la sequía
En las afueras de la ciudad costera de Saint-Malo, al oeste de Francia, la fábrica de Malo produce yogures de primera calidad del mismo nombre, así como leche entera en polvo, que se vende a fabricantes de chocolate o de bollería.
Al año, esta misma fábrica utiliza 20.000 m³, el equivalente a ocho piscinas olímpicas, para funciones internas como lavar el exterior de los camiones recolectores o para alimentar el sistema de calefacción. Para reducir este número, se llevó a cabo un innovador proceso por el cual se obtiene la conocida como "agua de vaca", para reducir el consumo del agua convencional.
El agua es el principal componente de la leche, siendo este porcentaje de casi en un 90%. En este contexto, el agua de vaca se obtiene durante la concentración de la leche de vaca, para la producción de leche en polvo que, como ya hemos nombrado, se vende a fabricantes de chocolate o bollería.
Para obtener este polvo, la leche se inyecta en un tubo vertical de acero, llamado concentrador, donde el agua es separada de la grasa, las proteínas, la lactosa y las sales minerales presentes en la leche, que se recuperan en forma de concentrado, que posteriormente se seca y se tritura hasta convertirse en polvo.
El director del proyecto, Xavier Macé, explicó que con cuatro litros de leche se pueden liberar un litro concentrado y tres litros condensados, que utilizan desde la fábrica para diferentes labores.
En la fábrica de Malo, esta agua de vaca se utiliza habitualmente para lavar los camiones cisterna que han recogido la leche. Pero se espera que se desarrollen otros usos, en contacto con alimentos, después del tratamiento y dependiendo de las regulaciones locales.
De hecho, los beneficios son tan amplios que Francia modificó recientemente su normativa para ampliar las posibilidades de reutilizar esta 'agua de vaca', pero también las aguas residuales tratadas en las propias plantas depuradoras de las fábricas.
La utilización del 'agua de vaca' ayuda a reducir la presión sobre el agua potable, para frenar la sequía, pero también para beneficiar al sector agroalimentario, que no puede funcionar sin agua para lavar herramientas o líneas de producción.
La fábrica de Malo no es la única que emplea este 'agua de vaca' sino que Nestlé, líder mundial en la industria alimentaria, afirma que recicla este líquido en varias de sus plantas de fabricación de leche en polvo, "particularmente en regiones donde los recursos hídricos son limitados".
El empleo de 'agua de vaca' en vez de agua potable ha conseguido una factura reducida de 40.000 euros al año en la fábrica francesa. Todo ello, teniendo en cuenta que todavía no utiliza todo el 'agua de vaca' que recolecta, y que los resultados podrían triplicarse.
El 'agua de vaca' en España
A pesar de que este proyecto iniciara en Francia, nuestro país ya ha puesto en marcha el 'agua de vaca' para reducir el uso del agua potable. En España, Queserías Entrepinares puso en marcha la medida, con la cual consigue reducir en un 30% el consumo de agua potable.
El proyecto español busca una solución sostenible para el uso del agua en la industria láctea. Dado que la leche está compuesta principalmente de agua y los procesos de producción requieren grandes cantidades de este recurso, a la vez que generan mucha agua residual, la propuesta es aprovechar el suero resultante de la coagulación de la leche.
Se plantea concentrar este suero mediante ósmosis inversa y, luego, purificar el agua filtrada utilizando nanofiltración con membranas especiales. Esto permitirá obtener agua de alta calidad, que se podrá reciclar de forma segura.
El objetivo es doble: por un lado, reducir el consumo de agua en la producción y, por otro, disminuir la cantidad de aguas residuales que se vierten en las plantas industriales.