Al menos públicamente, la dirección de Podemos sigue deshojando la margarita sobre si apoyará o no a un gobierno del PSOE. Sin embargo, un sector del partido morado tiene claro lo que hay que hacer en el complejo escenario político: provocar unas nuevas elecciones generales. La corriente de los anticapitalistas, habitualmente crítica con el rumbo escogido por Pablo Iglesias y cuya principal cara visible es la dirigente de la formación en Andalucía, Teresa Rodríguez, aboga por ir preparando los comicios con la intención de "superar al PSOE" y "aniquilar a Ciudadanos" en las urnas.
La hoja de ruta diseñada por Pablo Iglesias e Íñigo Errejón ya parece claramente encaminada hacia unas nuevas elecciones. De momento, tanto ellos dos como sus compañeros de filas han dejado claro que harán todo lo posible para que "el PP no gobierne" y han establecido como condición para negociar con el PSOE la celebración de un referéndum de autodeterminación en Cataluña, que es precisamente la única línea roja que el partido liderado por Pedro Sánchez se niega a cruzar. Una posición, en suma, que aboca a otros comicios. Eso sí, lo sucedido en Cataluña este fin de semana demuestra que la repetición de elecciones es un escenario que algunos partidos intentarán evitar a toda costa.
El grupo de Anticapitalistas, sucesor de la extinta Izquierda Anticapitalista, va más allá que los líderes de Podemos y ya da por hecho que se repetirán las elecciones generales. En un comunicado publicado en su página web, los miembros de esta corriente del partido emergente aseguran que "el resultado del 20D ha supuesto un gran paso para Podemos y el conjunto de las fuerzas del cambio, pero necesitamos todavía dar un largo salto".
"Gobernabilidad para el Ibex"
A juicio de esta corriente que lideran el eurodiputado Miguel Urbán y la citada Teresa Rodríguez, el reparto de escaños que salió de las urnas "supone un alto grado de inestabilidad y volatilidad política". Y, en ese escenario, "para las fuerzas conservadoras el objetivo inmediato es asegurar la gobernabilidad de España en los términos que interesan al Ibex 35, lo que requiere la calma chicha institucional mediante fórmulas como las de un 'gobierno de amplio espectro”.
Para las clases trabajadoras y populares el objetivo debe ser la configuración de un escenario favorable a los intereses de la mayoría social aprovechando la debilidad y desconcierto de las fuerzas del régimen
Los anticapitalistas denuncian que "se han intensificado las presiones para lograr 'pactos' a toda costa como si ello fuera en sí mismo un paso positivo, al margen de su contenido, o que se llegue al ridículo de comparar los acuerdos de investidura en las comunidades con las del gobierno español sin tener en cuenta la naturaleza y competencias diferentes". En otras palabras, este sector de Podemos parece poco proclive a un acuerdo con el PSOE. De hecho, en su reflexión aseguran que "para las clases trabajadoras y populares el objetivo debe ser la configuración de un escenario favorable a los intereses de la mayoría social aprovechando la debilidad y desconcierto de las fuerzas del régimen". "La 'gobernabilidad' que interesa a los de abajo es la que resuelve sus problemas -agregan-, no la que asegura el continuismo del régimen del 78".
La autodeterminación, clave
En este contexto, el sector crítico de Podemos remarca que deben tenerse en cuenta "unos puntos básicos para cualquier negociación de investidura". Puntos entre los que incluyen, como el propio Iglesias ha dicho en repetidas ocasiones, la garantía de que se celebren consultas de autodeterminación en diferentes partes de España. En concreto, exponen como condición indispensable "el derecho a decidir de los pueblos como única garantía de solución democrática para las aspiraciones de soberanía en las naciones que configuran el Estado español". Una frontera que, como se ha dicho, jamás cruzará el PSOE, sobre todo después de que los barones territoriales obligasen a Pedro Sánchez a comprometerse en esa línea.
La cruzada en nombre de la 'unidad de España' por parte del PP y de dirigentes socialistas de derechas como Susana Díaz no es sino una expresión de su dogmatismo nacionalista español
A mayor abundamiento, los anticapitalistas denuncian que "la cruzada en nombre de la 'unidad de España' por parte del PP y de dirigentes socialistas de derechas como Susana Díaz no es sino una expresión de su dogmatismo nacionalista español que impone una identidad nacional homogénea en un estado plurinacional, de su miedo a las urnas, de su escasa cultura democrática y de su incapacidad para potenciar las relaciones de solidaridad y cooperación entre los pueblos". Este discurso entronca a la perfección con las demandas de los socios de Podemos (Barcelona en Comú en Cataluña, las Mareas en Galicia y Compromís en Valencia) y choca con la postura de muchos dirigentes del PSOE.
Cómo enfocar las elecciones
A juicio de este grupo de Podemos, el 20 de diciembre se generó un "laberinto parlamentario" cuya principal consecuencia es que "lo más probable es que haya elecciones anticipadas". "Además -añaden mostrando sus intenciones-, no tiene ningún sentido apoyar una estabilidad institucional que favorezca los intereses de la derecha y la oligarquía". Así, piden que "las fuerzas del cambio" (Podemos y sus aliados territoriales) tienen que prepararse para los inminentes comicios.
Al contrario de lo que suele decir Iglesias, que aboga por una reforma de la Constitución en cinco puntos, los anticapitalistas abogan por una carta magna completamente novedosa. Para ellos, hay que encarar esas hipotéticas elecciones de manera que "ese nuevo reto suponga un salto para los intereses de la mayoría social, un nuevo avance de quienes proponemos el cambio en profundidad: nueva Constitución para posibilitar la participación democrática, nueva política económica al servicio de la mayoría". En esa línea, sostienen que "las elecciones deberemos enfocarlas con voluntad constituyente en las que las fuerzas del cambio ganen al PP, superen al PSOE y aniquilen a Ciudadanos, caballo de Troya de la auto reforma del régimen para salvarlo y al que debemos desenmascarar con mayor energía que hasta el momento".
Por último, el sector anticapitalista de la formación emergente aboga una vez más por solidificar las confluencias con otros partidos. Como ya adelantó EL ESPAÑOL, este grupo propone que se llegue a una alianza electoral con Izquierda Unida para la siguiente cita con las urnas. Otro punto de fricción con las intenciones de la dirección de Podemos que encabezan Iglesias y Errejón.