La oposición pedía a Manuela Carmena datos e informes acerca de las restricciones al tráfico en la Gran Vía. El PP amenazó con llevar la medida a los tribunales y Ciudadanos solicitó el papeleo que había llevado al Ayuntamiento a cerrar la arteria madrileña a los vehículos privados. Este lunes, aunque no de la mano del Consistorio, ha aparecido el primer informe. La principal conclusión que arroja el trabajo de Ecologistas en Acción revela un 32% menos de emisiones entre el 2 y el 8 de diciembre -primera semana de cortes- respecto a la media del mismo periodo entre 2013 y 2015.
Esta asociación ha recabado los datos de la estación de medición de la Plaza del Carmen -a sólo cien metros de la Gran Vía-, una de las siete que vulnera sistemáticamente los límites de dióxido de nitrógeno estipulados por la Unión Europea.
En contra de lo que ha venido sucediendo, esta plaza de medición ha sido la única que no ha superado los 100 microgramos de N02 por metro cúbico durante la primera semana de cortes. Entre las veinticuatro restantes lo hicieron en veinticinco ocasiones.
Durante 2014 y 2015, la contaminación, siempre según los datos de las estaciones de medición, se incrementaba conforme se acercaban las fechas navideñas. Este año, durante el primer periodo de restricciones al tráfico, la dinámica se ha tornado opuesta. Los niveles de dióxido de nitrógeno han sido menores que el mismo periodo en septiembre, octubre y noviembre.
El expediente de Bruselas
Ecologistas en Acción insiste en recordar que la Comisión Europea mantiene abierto un expediente a España por superar los niveles contaminantes marcados. En 2010 quedó establecido un límite de 200 microgramos por metro cúbico de aire. En 2015, ocho estaciones de las veinticuatro existentes en Madrid infringieron la pauta.
Este domingo finalizó el primer periodo de restricciones al tráfico tanto en Gran Vía como en las calles Mayor y Atocha y se reanudará el fin de semana que va del 16 al 18. El tercer y último corte se estirará desde el próximo 23 hasta el 8 de enero.