La Asamblea Constituyente de los 'comuns' de este sábado que fija la línea ideológica de la nueva formación, ha abordado su eje nacional y ha decidido aparcar la enmienda al texto fundacional que apostaba por crear un "país independiente", es decir, definir al nuevo partido como independentista, y apostar por la República social, democrática y ambientalmente justa.
Así lo han decidido los inscritos en la Asamblea Constituyente del nuevo partido de los 'comuns' a la que han asistido cerca de 2.000 personas y en la que han participado miembros de los actores como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello; los coordinadores nacionales de ICV, Marta Ribas y David Cid; el portavoz ecosocialista, Ernest Urtasun, y el líder de EUiA, Joan Josep Nuet, entre otros.
El líder de EnComúPodem en el Congreso, Xavier Domènech, ha sido escogido como portavoz del nuevo partido de los 'comuns' y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, será la nueva consejera nacional del partido, en unas elecciones primarias en las que han participado 5.540 inscritos.
En la Asamblea Constituyente de los 'comuns', se han hecho públicos los resultados a la Portavocía del partido -Domènech- a la Coordinadora Nacional -de 120 miembros- y a la dirección ejecutiva -de 32 miembros-.
En esa ejecutiva han salido escogidos la miembro del Consejo Ciudadano Estatal de Podemos Jéssica Albiach -diputada de SíQueEsPot- y el secretario general de Podem Barcelona, Marc Bertomeu, que han mantenido su candidautra 'Juntes Podem' pese a que la dirección de Podem Cataluña no está en la asamblea y, por el momento, no confluye en el espacio.
El texto que proponen los impulsores de los documentos fundacionales apuesta por "una República social, democrática y ambiental justa, como máxima expresión y realización de su soberanía nacional que quiere compartir soberanías con un Estado plenamente de carácter plurinacional".
La enmienda independentista que ha decaído en la votación apostaba por "un Estado republicano, social democrático y ambientalmente justo como máxima expresión y realización de su soberanía nacional"; y antes de la votación matizaba que esa república podrá compartir soberanías con un Estado plenamente plurinacional, pero esta frase ha sido eliminada por los que la proponían, haciendo la enmienda más independentista aún.
Esta enmienda se ha defendido en la asamblea y después ha sido votada, y ha recibido 148 votos a favor, 1.129 votos en contra y 67 votos en blanco, con lo que ha decaído.
"Estamos aquí para construir un nuevo futuro. No podemos quedar atrapados en etiquetas que construyen otros, en hojas de ruta que no son sino prisiones. Hojas proclamadas y nunca realizadas. Queremos trabajar por la República. Estamos construyendo convicciones, realidades y futuro", ha dicho el portavoz de los 'comuns', Xavier Domènech, que ha defendido el texto original que es el que se ha impuesto.
"Queremos la soberanía libre de Cataluña, pero la queremos compartida con todos los pueblos del Estado que son hermanos", ha añadido el portavoz de los 'comuns'.
RECHAZAN LA "INDEFINICIÓN"
En defensa de la enmienda independentista, el inscrito Carles Vidaller ha afirmado que los independentistas "tienen que ser visibles, de forma clara y sin complejos" en el nuevo espacio, y que lo mejor para Cataluña pasa por la constitución de un país independiente, algo que ha defendido que es tan respetable como el federalismo o el confederalismo.
"Es hora de acabar con las ambigüedades y construir un país con soberanía independiente", ha dicho Vidaller que ha tachado el resto de propuestas de conservadoras.
Domènech ha replicado que defender la libertad, la igualdad y la fraternidad, a través de conseguir todas las soberanías "no es indefinición, sin la propuesta revolucionaria", y en el mismo sentido, la también defensora de la propuesta original, Elisenda Alamany, ha lamentado que los independentistas defiendan una soberanía tapando el resto.
Alamany ha criticado al PDeCAT por sus políticas económicas y sociales basadas, a su juicio, en unos recortes que "no son austeridad, sino su ideología", algo que cree que sí que va en contra de las mayorías en Cataluña.
"El punto muerto en el que se encuentra Cataluña en el eje nacional, social y de radicalidad democrática sólo se soluciona con política y con más gente que sea capaz de desbordar las instituciones", ha sentenciado.
ENMIENDA FEDERALISTA
También ha decaído una segunda enmienda, federalista, que defendía la república como forma de Estado que lucha por una Cataluña democrática, social y ambientalmente justa, que ejerza su soberanía nacional decidiendo el tipo de relación, "siempre fraterna, que tiene que tener con el resto de pueblos y naciones que forman el Estado español".
La asamblea ha respaldado esta enmienda otorgándole 300 votos a favor -el doble de votos de los que ha recibido la independentista-, 960 en contra y 98 votos en blanco.
Colau: "Es un paso histórico de unidad"
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha afirmado: "Somos comunes, porque buscaremos siempre la unidad de la gente" para hacer frente a las políticas de la "miseria y de la austeridad" y a la política del "miedo", que se materializa hoy con el nuevo partido de los 'comunes', un "paso histórico de unidad".
Colau ha intervenido en la asamblea fundacional del nuevo partido de los comunes, en la que ha sido elegida para dirigir la coordinadora nacional, órgano compuesto por 120 miembros, mientras que Xavier Domènech será el coordinador de la ejecutiva.
En su discurso, Colau ha hecho reiteradas menciones a la unidad de las clases populares y ha defendido la esencia de los 'comunes': "Somos comunes, porque tenemos memoria, porque la historia ya escrita no nos esperaba (...). Somos comunes y buscaremos siempre la unidad de la gente, frente a las políticas de la miseria, de la austeridad. Somos comunes, porque siempre tendremos claro que nuestro bando es la gente", ha dicho.
Por ello, con el partido naciente hoy quieren, ha dicho la alcaldesa, hacer política con "la gente y para la gente", un "paso histórico de unidad" con el que romper "ese guión previsible y oficialista", porque "no nos esperaban".
Colau ha reivindicado las alianzas "desde la diversidad", sin renunciar a las señas de identidad, como elementos de "riqueza y fuerza", para ser "imparables".
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