Un dirigente del colectivo LGTB bromea un día después de la marcha del Orgullo: "Sí, sí, el documento de compromiso firmado por el PP lo guardamos en una caja fuerte". Por primera vez, hubo representación popular tras la pancarta reivindicativa de gays, lesbianas y transexuales. El éxito en la convocatoria empuja la apertura de los conservadores.
El paseo arcoíris de Atocha hasta la plaza de Colón fue el símbolo, pero existe un papel, el "documento" del que habla este representante de los organizadores de la manifestación, que sostendrá el giro del partido en el Gobierno en favor de la ley de la diversidad que votará el Congreso de los Diputados en septiembre. Un texto transversal, desde la educación a la salud pasando por lo policial, que pondrá a España en la vanguardia de la defensa de estos derechos.
Así se cursó la invitación al PP
Los de Rajoy aseguran que esta vez fue la primera que se les invitó al Orgullo, pero cada año la Federación organizadora -FLGTB- ofrece la participación a todos los partidos a cambio de una suerte de contrato, este año desglosado en cinco puntos, uno de ellos el "compromiso firme para que el texto aprobado por el parlamento sea, en términos generales, lo más cercano posible al consensuado por la mayoría del movimiento LGTB".
Según ha sabido este periódico, fue Javier Maroto, vicesecretario del PP, quien firmó el folio en nombre de su partido "previa aprobación de su Ejecutiva". De ahí que su presencia, además de la de Andrea Levy, también vicesecretaria, no fuera a título particular, sino jerárquica, consensuada con Rajoy.
Si el Gobierno cumple con lo previsto, a pesar de las enmiendas que haga, trabajará para que la ley contra la discriminación sea el "sueño cumplido" del movimiento LGTB.
Aunque se preveía que el viraje del PP se quedaría en la abstención a esta propuesta legislativa, la existencia de este papel y las palabras de Levy y Maroto durante la marcha apuntan a un giro completo: el "sí" en el Congreso.
"La apuesta del PP es real"
La FELGTB, tras el intercambio de palabras este sábado con los miembros participantes del PP, califica la apuesta de Rajoy como "real". La propia Levy, en una entrevista televisiva, fue preguntada por lo espinoso del viraje de su partido. ¿Les ha costado mucho llegar hasta aquí? "Lo importante es que estamos aquí", respondía intentando dejar el pasado atrás.
El aparente noviazgo entre PP y movimiento LGTB ha sido más cortejo que flechazo. Según cuenta uno de los organizadores, no se cursó la invitación al Gobierno hasta que transcurrió el plazo del que disponían para vetar la entrada del texto legislativo a la Cámara.
Podemos, "correa de transmisión"
La ley contra la discriminación fue registrada por Podemos en el Congreso el pasado 4 de mayo. El movimiento LGTB reitera que el partido de Iglesias ha sido sólo "correa de transmisión": "Necesitábamos que alguien la llevara y ellos se mostraron dispuestos, pero Ciudadanos y PSOE también estaban de acuerdo. Es importante resaltar que el sentir del texto no es político, sino reflejo de nuestras reivindicaciones".
El verano primero y la transversalidad de la propuesta después dilatarán los plazos. Cada partido podrá presentar sus propias enmiendas al boceto del colectivo, pero el final se augura "feliz". Todos ellos han firmado para poder colocarse tras la pancarta, pero también para dotar a España de una verdadera protección para gays, lesbianas y transexuales.