Una encuesta da la victoria a Cs y al independentismo una mayoría ajustada

La primera encuesta publicada tras el cierre de colegios electorales coloca al independentismo en condiciones de lograr la mayoría absoluta. Ciudadanos sería el primer partido, con un 26% de los votos, pero la suma del independentismo se situaría entre los 67 y los 71 escaños, según la encuesta de GAD3 para La Vanguardia y RAC1. La mayoría absoluta está en 68 diputados. 

Se trata de una encuesta hecha con entrevistas telefónicas durante toda la campaña y la misma jornada electoral, no de los tradicionales sondeos a pie de urna. La participación estimada es del 84%, un récord histórico, superando el 80,7% de las elecciones generales de 1982 en Cataluña. 

Datos de la encuesta de GAD3 para el Grupo Godó.

Estos datos confirmarían el éxito de la campaña de Inés Arrimadas, que capitanearía el primer partido de Cataluña. A pesar de eso, sería una victoria amarga porque al Govern podrían llegar las fuerzas independentistas que hasta ahora lo han sostenido. Todo depende de que la suma de Esquerra Republicana, Junts per Catalunya y la CUP lograsen los 68 escaños que otorgan la mayoría absoluta. 

De lo contrario, todo dependería de Catalunya en Comú Podem. Con una abstención del partido de Xavier Domènech y Ada Colau, el independentismo seguiría gobernando en Cataluña, aunque no estaría claro con qué programa ni con qué líder.

Carles Puigdemont apuesta por volver al Palau de la Generalitat incluso si su lista, Junts per Catalunya, es tercera fuerza, como indica este sondeo. ERC sigue apostando por Oriol Junqueras, ahora en prisión preventiva, en caso de que su lista venza en las urnas, como dicen todos los sondeos. 

"Hoy el 155 morirá en las urnas", dijo en una primera valoración Elsa Artadi, jefa de campaña de Junts per Catalunya. 

Por su parte, la encuesta confirmaría un repunte del PSC, que pasaría de los 16 a los 18 o 20 escaños, el PP se hundiría hasta los 3-5 (ahora tiene 11) y Catalunya en Comú Podem pasaría de los 11 a los 7-8. Los constitucionalistas estarían, de esta manera, muy lejos de poder gobernar en Cataluña.