El ventilador del PP en el caso Cifuentes: de la beca de Errejón a la tesis de Pedro Sánchez

La vetusta táctica de defenderse atacando. Con munición a diestro y siniestro. La misteriosa tesis de Pedro Sánchez en la Universidad Camilo José Cela o la beca de Iñigo Errejón en la Universidad de Málaga son dos de las armas que el Partido Popular está utilizando para contrarrestar el efecto demoledor que ha generado el escándalo del máster de Cristina Cifuentes en la Universidad Rey Juan Carlos.

El PP ha encendido el ventilador contra sus oponentes. La formación gobernante ha desenterrado múltiples cuestiones relacionadas con la universidad como las dudas sobre la tesis del líder del PSOE, como la sanción a Errejón por aquella beca, como los diez años que tardó Susana Díaz en terminar su carrera de Derecho o como el litigio de Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero con la Universidad Complutense por diferentes cuestiones. 

Además, los populares entremezclan estos asuntos con otros como "las cuentas falsas de Ciudadanos en 2014 y 2015" -en alusión al informe del Tribunal de Cuentas sobre el partido naranja- o como que "el número dos de Cs en Madrid ejercía de abogado sin serlo" -en alusión a César Zafra, que trabajó sin contrato en el bufete de Martínez-Aybar-. 

Todos estos asuntos, aleados en una suerte de tótum revolútum, fueron mencionados y relacionados este martes por el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando. Y fueron también utilizados después en las redes sociales por el PP madrileño, que publicó un hilo de 21 mensajes. Todo ello con la intención de demostrar "la doble vara de medir de Ciudadanos", en palabras de Hernando, y que el caso de Cifuentes es "un escándalo absolutamente desproporcionado", en tuits del PP madrileño.

El ventilador funciona como forma de respuesta y parece que este es el argumentario de Génova 14 para defender a la presidenta de la Comunidad de Madrid. Y, entretanto, todos en el PP, tanto el nacional como el madrileño, aguardan a Mariano Rajoy, que este martes ya apelaba al "sentido común" y a la celeridad en la resolución del caso. Porque unos y otros saben que, si el presidente de Gobierno se lo pide, Cifuentes sí dimitirá y se acabará la estrategia del ventilador.