El Sistema de Coordinación de Operaciones Antiterroristas (SCI-SICOA), la base de datos que comparten CNI, Guardia Civil y Policía Nacional, detalla que 37 individuos que han combatido en Siria o Irak filas de organizaciones terroristas -principalmente Estado Islámico o Al Qaeda- han vuelto a territorio español. Se les llama retornados y se les somete a un estrecho seguimiento para conocer sus movimientos, vínculos y planes, en una medida de prevención para evitar futuros atentados.
La base de datos SCI-SICOA es una de las bases sobre las que se erige la lucha antiterrorista en España. Policía Nacional, Guardia Civil y CNI comparten la información en ella recogida y se coordinan para ser más efectivos. Individuos radicalizados, personas que, por su historial, son sospechosas de estar integradas en una célula terrorista, yihadistas que ya han sido detenidos... el cruce de datos es fundamental para abrir nuevas vías de investigación.
Entre esos datos figura la estadística de 37 retornados, personas que han regresado desde Siria o Irak y a las que, según cuentan fuentes de la lucha antiterrorista, se les sigue por su alto grado de radicalización. En algún momento han combatido bajo banderas yihadistas, ya sea del Estado Islámico, de Al Qaeda o de cualquier de sus sucursales que operan en la región. Las continuas derrotas militares que han sufrido estas organizaciones han provocado el viaje de vuelta de más individuos: en un año, la cifra ha pasado 17 a 37 retornados.
El mensaje de Al Bagdadi
Las organizaciones terroristas están perdiendo territorio en Siria e Irak a marchas forzadas tras encadenar incontables derrotas militares. Así lo reconoció entre líneas el líder de Daesh, Abu Bakr al Bagdadi, en una reciente aparición, pese a que no faltaban voces que le daban por muerto. Hablaba de una derrota inminente si los fieles "abandonan su religión, su paciencia y la yihad contra el enemigo". También llamaba a actuar, en cualquier lugar y en cualquier circunstancia. En resumen, a perpetrar más atentados para que el eco del Estado Islámico siga resonando pese a sus derrotas en Siria e Irak.
Fuentes policiales advierten de que este mensaje puede calar especialmente entre los 37 retornados. Las estadísticas son públicas en el informe anual que presenta el Departamento de Seguridad Nacional (DSN): "El posible retorno de combatientes terroristas extranjeros (CTE) supone una amenaza en toda Europa y pondrá a prueba todos los elementos de alerta temprana que se han ido implementando en Europa con este fin", reza el documento.
Las cifras
El Informe de Seguridad Anual del DSN arroja más cifras: 223 españoles o residentes en España se han desplazado en los últimos años a Irak y Siria para integrarse en los entramados terroristas. Se trata de hombres y mujeres que cumplen diferentes funciones, que van desde el combate hasta labores de mantenimiento, cohesión o financiación.
De esos 223, 48 han fallecido. Hay cuatro menores y 23 mujeres. El Departamento de Seguridad Nacional estima que todavía permanecen 135 individuos en zona de conflicto.
"Los actores solitarios son otra amenaza terrorista importante. Su identificación y neutralización en las fases inmediatamente previas a sus ataques es uno de los retos más difíciles", señala el informe, que también hace un llamamiento a anular la propaganda yihadista y a "intensificar las actividades de Inteligencia para prevenir y neutralizar sus efectos".
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