La Guardia Civil descarta ahora que los 8 detenidos por el crimen de Barbate mataran a los agentes
Un informe de los investigadores concluye, tras analizar las grabaciones aportadas por los detenidos, que ellos no iban en la narcolancha que arrolló y mató a los guardias civiles.
8 mayo, 2024 19:05La Guardia Civil acaba de reconocer por primera vez en un informe que Kiko El Cabra y el resto de detenidos por el asesinato de dos miembros del Instituto Armado en el puerto de Barbate no eran los tripulantes de la narcolancha que arrolló y mató a los agentes.
Según dicho informe, al que ha podido acceder EL ESPAÑOL, la semirrígida que arremetió hasta seis veces contra la zódiac de la Guardia Civil, ocasionando la muerte de los agentes de Miguel Ángel González y David Pérez Carracedo,"no es la narcolancha intervenida la mañana del día 10 de febrero", en La Línea de la Concepción, en la que se arrestó a un total de ocho personas, entre las que estaba Kiko El Cabra.
En consecuencia, prosigue el informe, "es posible descartar la participación de los actualmente investigados en la perpetración de los delitos de asesinato y atentado agravado objeto de las presentes pesquisas, sin que ello afecte a la presunta comisión de un delito de contrabando".
El informe tiene fecha del 7 de mayo y ha sido elaborado por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Cádiz. Concretamente, por el Equipo de Homicidios y Delitos contra las Personas, así como por la Sección de Homicidios, Secuestros y Extorsiones de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil.
Este documento supone un vuelco total a la investigación sobre el crimen perpetrado aquella mañana de febrero en Barbate. El expediente remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbate se centra en analizar los vídeos aportados por José Antonio González Cazorla, apodado El Cabra, el principal de los arrestados, y el resto de tripulantes de la embarcación.
Lo que presentaron para demostrar su inocencia acreditaba que, cuando los agentes de la Guardia Civil fueron asesinados, ellos estaban presenciando los hechos pero a una cierta distancia de la tragedia. Que no arrollaron y mataron a los guardias aunque estaban aquella noche en el agua como testigos del ataque.
Así lo admiten ahora los investigadores, que comenzaron sus pesquisas sobre este particular ante la insistencia de El Cabra y el resto de acusados en sus declaraciones, alegando que se "encontraban a bordo de una narcolancha distinta a la autora".
Los detenidos estaban situados en la bocana del puerto de Barbate, y así quedó reflejado en los vídeos que aportaron al juez y que han sido analizados por la Benemérita. Los agentes señalan que "sería coincidente este emplazamiento con la perspectiva desde la cual parece realizarse la grabación".
El informe prosigue añadiendo que se trata de "un lugar compatible a su vez con la narcolancha de cuatro motores advertida en la reconstrucción de los movimientos registrados por la narcolancha que embiste a la embarcación de la Guardia Civil".
Con la información obtenida en los volcados de los terminales de los detenidos, los investigadores localizaron una grabación de vídeo de tres minutos y 33 segundos. "Este vídeo recoge la secuencia de movimientos efectuados por una narcolancha diferente a la que se encuentra José Antonio González Cazorla (El Cabra) antes, durante y después de llevar a cabo la fatal agresión, la cual quedó filmada en el vídeo grabado por el usuario del terminal analizado".
Los agentes de la UCO y de la Comandancia de Cádiz han analizado y revisado todas las cámaras del puerto y los vídeos hallados en los terminales de los detenidos. Aquella noche en el puerto de Barbate hubo dos narcolanchas con cuatro motores.
La que embistió a los guardias civiles, como se puede comprobar en las grabaciones, tenía una sola antena. La lancha de El Cabra, incautada a la mañana siguiente, tenía dos. Así se demuestra en las grabaciones, que acreditan que estaba a cierta distancia de la zona del ataque.
Este nuevo vídeo, a juicio de los investigadores, "despejaría las dudas", y acreditaría que como se ve en las grabaciones, fue la narcolancha de una sola antena y cuatro motores, diferente a la incautada y en la que viajaban los detenidos, la que arrolló y mató aquella noche a los guardias.
El autor, libre
Este hallazgo pondría sobre la mesa los errores que aquella noche se pudieron cometer en los primeros compases de las pesquisas. También que el autor real de los asesinatos seguiría libre.
Por el momento, los detenidos han aportado información sobre una narcolancha de similares características a la que se ve en las grabaciones, y que ha sido hallada, como informó EL ESPAÑOL, en el puerto de Mazagón (Huelva).
El juez que instruye la investigación ordenó hace unos días la intervención de esta embarcación, ante la sospecha de que pudiera ser la que verdaderamente habría causado la muerte a los agentes del Instituto Armado.
Tal y como adelantó este periódico, esta embarcación presenta idénticas características con la que aquella noche mató a los agentes. Al conocer este hecho, las defensas de Kiko El Cabra y el resto de los detenidos como presuntos autores del crimen pidieron que "se cotejase esta lancha".
Las defensas sostienen que quien condujera dicha lancha fue quien realmente perpetró el crimen. Por eso, "ante el elevado riesgo de alteración de una fuente de prueba de tal relevancia", las defensas pidieron el "inmediato precinto de la misma y puesta a disposición de la presente causa".
Periciales
Las pruebas aportadas por los investigados son las que ha analizado la Guardia Civil, admitiendo finalmente que no serían los culpables de los dos asesinatos. La abogada defensora de uno de los detenidos remitió al juez a principios de abril una prueba pericial videográfica junto a diez grabaciones.
Entre ellas, según pudo comprobar EL ESPAÑOL, aportaba un vídeo de 35 segundos grabado desde la embarcación en la que se encontraba su defendido.
En el informe pericial se analizaban diez vídeos. Algunos de ellos fueron publicados el día de los hechos por los medios de comunicación. Otros, aportados por los propios detenidos al haber sido grabados desde la embarcación en la que se encontraban.
En el análisis de la colisión, el perito señalaba que en una de las grabaciones se aprecia cómo "una de las embarcaciones que embiste previamente a la colisión, donde podemos observar que dispone de una sola antena y uno de los tripulantes va vestido con algo rojo/naranja".
En otro de los vídeos, el perito de parte señala: "Justo en el momento de la colisión, podemos ver como uno de los ocupantes de la embarcación viste con una vestimenta roja/naranja".
En cambio, el que estaba grabado desde la narcolancha de Kiko El Cabra evidenciaba que esa embarcación era diferente. "Podemos ver cómo desde la embarcación de cuatro motores y dos antenas [la de El Cabra] se aprecia cómo la embarcación de cuatro motores y una antena [la que supuestamente embistió] está dando vueltas alrededor de la embarcación de la Guardia Civil".
En el vídeo grabado por los detenidos se aprecia cómo en esa embarcación, la que embestía, había, efectivamente, alguien vestido de color naranja. Esa es la persona que se busca, a la que todavía no se ha podido identificar y quien podría haber cometido el crimen.