España CASO KOLDO

Ábalos se reunía en el MITMA con el comisionista Aldama, considerado "parte del Ministerio"

El informe de Transportes incide en que la figura de Víctor de Aldama era ambigua, ya que formaba parte de la empresa Soluciones de Gestión pero parecía ser del Ministerio. 

25 agosto, 2024 03:45
Sara S. Bas Javier Corbacho Alberto D. Prieto

Víctor de Aldama, el comisionista del caso Koldo, "formaba parte del Ministerio" de Transportes, o eso parecía desde fuera, según Álvaro Sánchez Manzanares, el secretario general de Puertos del Estado en el momento de la trama. 

En el informe de la auditoría interna del Ministerio de Transportes, encargado por Óscar Puente, se hace referencia al empresario Víctor de Aldama como "una figura gris", de la que era difícil "dilucidar" su papel durante los inicios de la pandemia de la Covid-19. 

En los correos electrónicos intervenidos por la UCO y a los que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, se refleja que la información de la compra de mascarillas por parte del Ministerio de Transportes a la empresa Soluciones de Gestión SL se comunicaba directamente a Aldama tanto por parte de la empresa como del Ministerio. 

El secretario general de Puertos del Estado ha explicado a los autores del informe que, cuando se le preguntaba a Koldo García Izaguirre por el papel de Aldama, respondía que era una persona que "nos está ayudando mucho", refiriéndose a la gestión de la búsqueda y compra de material sanitario para los inicios de la pandemia. 

Por ese motivo, Álvaro Sánchez Manzanares consideraba a Víctor de Aldama "más parte del Ministerio que de la empresa". El informe, sin embargo, explica que "el Sr. Aldama aparece en correos electrónicos remitidos a la empresa o incluso remitidos por ella". 

Visitas "a nivel ministro"

Tal y como publicó EL ESPAÑOL, Koldo García utilizaba el despacho de José Luis Ábalos para reunirse con contratistas cuando exministro no estaba. Una de las personas con las que mantenía encuentros era Víctor de Aldama, por entonces un desconocido. De hecho, según la querella de la Fiscalía Anticorrupción, el empresario Aldama contaba con "un pase especial" en el Ministerio de Transportes.

Según el informe de auditoría, Álvaro Sánchez Manzanares sabía que Aldama estaba delante cuando Koldo hacía sus "llamadas telefónicas". A todo esto se le suma que "negociaba aviones como habilitado por el ministro". 

Cuando se le pregunta al Oficial Mayor por la cuestión de Víctor de Aldama, responde que "hacía visitas a la sede central del Ministerio, a nivel ministro", lo que confirma que también se reunía con el exministro Ábalos, según el informe.

De 4 a 8 millones 

La otra gran incógnita que se plantea el informe de Transportes tiene que ver con el incremento en la compra de mascarillas por parte de Ábalos.

Según consta en la auditoría interna, el Ministerio de Transportes remitió el 20 de marzo de 2020, a las 19:55h, una orden ministerial firmada por Ábalos para la compra de un máximo de 4 millones de mascarillas a la trama de Koldo.

Sin embargo, 38 minutos después, las 20:33 horas, Ábalos remitió una segunda orden, en la que duplicaba el importe de este pedido hasta los 8 millones de mascarillas. Este material sanitario estaba destinado a Puertos del Estado.

Esta segunda orden ministerial se firmó después de que Koldo García, asesor del entonces ministro, hubiera advertido de que "el proveedor [Soluciones de Gestión SL] suministraba ocho millones o nada".

El 'caso Globalia'

La gran pregunta en juego está en saber exactamente el papel que juega en todo esto Aldama. Máxime porque el propio Ábalos reconoce haberlo conocido en el Ministerio porque trabajaba para Globalia. Aunque el grupo turístico negó en un primer momento ninguna vinculación con el empresario, más tarde reconoció que sí existía una relación que databa de 2018. 

Una relación que se hacía pública después de que este diario publicara unas fotografías del CEO de Globalia, Javier Hidalgo, junto a Aldama en un viaje a Oaxaca, en México. Fue en 2019 cuando el grupo turístico cerró un contrato de asesoramiento que se mantuvo en el tiempo hasta finales de 2020; fecha en la que Air Europa cerró su programa de rescate para evitar la quiebra por las pérdidas provocadas por la pandemia. 

El exministro ha reconocido que Aldama se interesó por el rescate, aunque también asegura que no influyó en el expediente, dado que el Gobierno tuvo siempre claro que la aerolínea era estratégica para el país.