El calendario del PSOE y, de paso, de la investidura de Mariano Rajoy comienza a despejarse. La gestora que dirige el PSOE ha convocado este martes la nueva reunión del Comité Federal para este domingo, tal y como se esperaba.

En ella, el PSOE tendrá que decidir si se abstiene para facilitar la investidura de Rajoy y evitar las terceras elecciones en menos de un año. Pero además del qué importa el cómo. Con un partido muy dividido, el Comité Federal tiene que decidir si apuesta por una abstención unitaria, aun a riesgo de que se rompa la disciplina de voto, o si se la encarga a los 11 diputados que le faltaron al candidato del PP en la última investidura. 

La reunión comenzará a las 9:30 horas en el mismo día en el que Pedro Sánchez pretendía que los militantes decidiesen en unas primarias quién quería que fuese su secretario general. En la gestora y numerosas federaciones se defiende desde esta semana abiertamente la abstención. Bien directamente o por eliminación, al argumentar que no hay posibilidad de conformar un Gobierno alternativo y que es urgente acabar con la inestabilidad institucional. 

Antes de la reunión de la gestora, Fernández se dirigió a los diputados y senadores en una reunión en la que  advirtió de que "el edificio político del PSOE está muy dañado. Pero conservamos el solar", argumentó. Según él, "lo más probable es que unas elecciones lo que digan es cómo, cuándo y con cuántos diputados va a gobernar la derecha". Es decir, que mejor evitarlas. 

Por su parte, Miquel Iceta titubeó al aceptar que Rajoy pueda ser investido con una abstención mínima de los diputados imprescindibles, aunque después aclaró que el PSC estará en contra de que el líder del PP siga en la Moncloa, decida lo que decida el PSOE. 

Por otra parte, diputados muy cercanos a Pedro Sánchez han anunciado que no romperán la disciplina de voto. Es el caso de César Luena, el que fuera su número dos como secretario de Organización, y de Adriana Lastra, miembro de su Ejecutiva. Pero también de Sara Hernández, secretaria general del PSOE de Madrid, que en la noche de este martes celebrará una reunión para decidir su postura. 

Sánchez, de vuelta en Madrid tras unos días de descanso en el extranjero, no acudió a la reunión y sigue manteniéndose en silencio. 

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