Albert Rivera defenderá en persona el giro liberal de Ciudadanos en el congreso de este fin de semana. El presidente del partido se ha acreditado como un compromisario más en la comisión que debatirá la renuncia a la socialdemocracia en el documento que define los Valores de Ciudadanos. El ponente designado para defender la postura de la dirección es Juan Carlos Girauta, pero la presencia de Rivera demuestra que el cambio divide a la militancia más de lo que parece. El debate será a puerta cerrada.
Ciudadanos inicia este sábado su IV Asamblea General, la más importante desde su fundación en 2006. Unos 600 compromisarios se reúnen en el nuevo Teatro de Coslada (Madrid) para, como dijo Rivera en su entrevista con EL ESPAÑOL, definir un nuevo centro político que permita a Ciudadanos ensanchar su electorado y ofrecer un proyecto de gobierno alternativo al PP y el PSOE. El partido naranja va a completar en este congreso su transición de Ciutadans a Ciudadanos, de formación catalana a organización de ámbito nacional.
El debate en torno a los Valores, que definen la identidad del partido, es el más importante de la Asamblea y, también, un síntoma de otras discrepancias más profundas con la estrategia de Rivera. Hay sectores que ven el discurso de Ciudadanos plastificado y sin fuerza y creen que el partido se ha escorado a la derecha. El documento que propone la dirección elimina, por un lado, la influencia ideológica de la socialdemocracia, presente desde el nacimiento de Ciudadanos, y, por otro, la referencia a sus orígenes como fuerza política creada para hacer frente al nacionalismo. Ciudadanos se define ahora como una organización política liberal progresista "que se enmarca en la tradición constitucional nacida con la Ilustración, la Constitución norteamericana y la Revolución Francesa".
Liberalismo y socialdemocracia
Rivera dijo a EL ESPAÑOL que Ciudadanos "tiene que separarse de la izquierda en ser más liberales y de los conservadores en defender libertades individuales". Pero un amplio sector de la militancia no comparte esta etiqueta. Defienden que es la combinación de liberalismo y socialdemocracia todavía vigente la que les ha permitido crecer tanto y aseguran que el partido que salga del congreso no será Ciudadanos, sino "otra cosa".
El malestar de este grupo de afiliados ha crecido en los últimos días por la poca predisposición al diálogo que, a su juicio, ha mostrado la dirección. Una lista de compromisarios agrupada bajo el nombre Mejor Unidos y formada en su mayoría por militantes catalanes afiliados a Ciudadanos desde su nacimiento ganó a la candidatura oficial de Rivera las primarias en Cataluña de hace unas semanas.
Estos compromisarios, entre los que se encuentra el que fuera mano derecha de Rivera en el Parlament Jordi Cañas, defienden una enmienda a la totalidad para recuperar las viejas señas de identidad de Ciudadanos. No están solos. Decenas de agrupaciones en toda España respaldaron su iniciativa. La comisión de Valores debatirá 25 enmiendas, que pasaron un filtro de selección y votación de las bases. Las posibilidades de que prospere alguna de ellas son escasas. Los compromisarios afines a Rivera son el 70% de la Asamblea.
Los delegados catalanes están abiertos a negociar un acuerdo a cambio de retirar la enmienda a la totalidad. La propuesta de consenso es recuperar la socialdemocracia como fuente de influencia ideológica, pero dejando claro al mismo tiempo que Ciudadanos enmarca su acción política en el "liberalismo progresista". No parece que la Ejecutiva se plantee aceptar la transacción. Y Girauta, con Rivera presente y participando, se ceñirá al texto tal y como figura en su borrador.
Los Valores no serán el único debate en la primera jornada de la Asamblea. Los compromisarios aprobarán un informe de gestión de la Ejecutiva saliente, en el que se dará cuenta del crecimiento del partido tras la serie de procesos electorales iniciados con las europeas del 2014.
Estrategia y Estatutos
Después llegará el debate en torno a las nuevas ponencias del partido. Todas ellas a puerta cerrada. Los delegados se dividirán en tres comisiones: Valores, Estrategia y Estatutos. Los ponentes de la dirección en Estrategia serán el secretario general, José Manuel Villegas, y el secretario de Comunicación, Fernando de Páramo. En Estatutos, el secretario de Organización, Fran Hervías, y José María Espejo, secretario de Acción de Grupos Institucionales.
Al igual que en el caso de Valores, las otras dos comisiones debatirán y votarán 25 enmiendas a cada uno de los documentos. La tensión en estos casos se prevé menor. En los Estatutos, la dirección apoya una enmienda para retirar la prohibición de las corrientes de opinión internas que figuraba en el texto original. En Estrategia, el congreso de Ciudadanos avalará la apuesta de entrar a gobiernos de coalición a partir de las elecciones autonómicas y municipales del 2019. Una enmienda pide que esa entrada se produzca de forma inmediata, pero es improbable que salga adelante. También hay enmiendas más coloridas, como la que sugiere no citar al expresidente Adolfo Suárez.
Los documentos que finalmente salgan de las comisiones, enmendados o no, serán votados por el plenario de la Asamblea (los 600 compromisarios) para su aprobación definitiva y entrada en vigor.
Verhofstadt, el domingo
El congreso concluirá el domingo con la elección de los integrantes de los órganos del partido como el Consejo General, similar en su funcionamiento al Comité Federal del PSOE. La clausura contará con los discursos del secretario general, José Manuel Villegas, el presidente del grupo parlamentario de la Alianza Liberal Demócrata Europea (ALDE), Guy Verhofstadt, y finalmente Rivera.
Ciudadanos ha invitado a otros partidos políticos a la clausura. De momento, han confirmado su asistencia los vicesecretarios del PP Pablo Casado y Fernando Martínez Maillo.
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