El día que TV3 acabó con la paciencia de Ciudadanos
- Albert Rivera rompe uno de los tabúes más longevos del nacionalismo catalán y acusa a TV3, en vivo y en directo y frente a una de sus presentadoras estrella, de mentir.
- Rivera le canta las cuarenta a TV3: "Sois un aparato de propaganda separatista".
- 12 horas en el circo del odio' de TV3: cuando España es como Japón.
Albert Rivera demolió ayer un tabú en Cataluña y la onda expansiva del derrumbe reverberó hasta en Bélgica. Para comprender el impacto entre las huestes separatistas de lo ocurrido ayer por la mañana en el programa Els Matins basta con decir que TV3 es tan madre del régimen nacionalista catalán como padre lo fue Jordi Pujol. Al menos hasta su caída en desgracia por esos casos de corrupción que, conviene recordarlo precisamente hoy, no fueron destapados por la cadena de televisión autonómica sino por aquellos periodistas a los que TV3 suele llamar "la caverna mediática".
Y no es que los pies de barro del prestigio de TV3 no hubieran sido embestidos antes por gente como Inés Arrimadas o Javier Ortega. Porque tanto la ganadora de las elecciones catalanas como el abogado de VOX han tenido por costumbre acudir a las tertulias de TV3 sin esa mochila cargada de complejos de mal catalán que acarrean a su espalda los políticos del PSC o los comunes de Ada Colau. Un peso muerto que ha permitido que en la región se consolide la idea de que todos los catalanes están de acuerdo en estar de acuerdo con sus líderes nacionalistas. El famoso oasis.
Pero nunca hasta ayer alguien del peso de Albert Rivera, presidente del cuarto partido del Congreso de los Diputados, representante de más de un millón de votos en Cataluña y de tres millones de votos en toda España, le había dicho a la cara a una de las presentadoras estrellas de la cadena lo que es evidente para cualquiera que gaste cinco minutos de su vida frente a la programación de la televisión autonómica catalana. Que TV3 es "un aparato de propaganda separatista". Que TV3 miente. Y que lo hace "cada día". "¿Ah sí?", fue la única respuesta de Lídia Heredia.
@Albert_Rivera "Vostès són un aparell de propaganda separatista. En aquesta casa es fa propaganda de l'independentisme. M'agradaria que algun dia TV3 fos de tots els catalans perquè la paguem tots" #ElsMatinsTV3 pic.twitter.com/6VAHeffYD9
— Ciutadans (@CiutadansCs) 7 de septiembre de 2018
No es aventurado suponer que la andanada de Albert Rivera no fue espontánea. Heredia cayó en la trampa, el líder de Cs obtuvo la respuesta deseada y el resto del día pudo dedicarlo a recoger los frutos del vareado árbol de la siempre frágil autoestima nacionalista. Sirvan como ejemplo los siguientes tuits.
Decirle a Lidia Heredia que miente y hace propaganda "todos los días" es lo que hace Trump con los periodistas que le molestan, con la diferencia que a Trump le rebaten las principales cabeceras de su país mientras que en España a Rivera se le rien las gracias.
— Arturo Puente (@apuente) 7 de septiembre de 2018
És comprensible que qui té com a model de veritat i rigor la premsa espanyola dels grans grups de comunicació, que l'ensabonen per esmorzar, dinar i sopar, pensi que TV3 menteix.
— Carles Puigdemont (@KRLS) 7 de septiembre de 2018
Hola @Albert_Rivera. TV3 no dijo que SCC es de extrema derecha. Lo decimos mucha otra gente, por sus fundadores y por la fauna que siempre hay en sus manifestaciones. Ojalá lo hubieran dicho. Porque es la pura verdad. Sois un sector ideológico que atrae a lo más abyecto.
— Pilar Carracelas (@pilarcarracelas) 7 de septiembre de 2018
Rivera no es más que un demagogo oportunista encumbrado por ciertos padrinos como vacuna de una enfermedad que, paradójicamente, empeora cada vez que la criatura hace su teatrillo. Hoy, en tv3, el muñeco ha pinchado estrepitosamente.
— Francesc-Marc Álvaro (@fmarcalvaro) 7 de septiembre de 2018
Lo más irritante de la chulería de este fascista es la impunidad con que amenaza a los medios libres en un país en el que nadie nunca pudo decir tales cosas en TVE que sí es un nido de propagandistas de la derecha. https://t.co/rsPNSVTVSc
— Ramón Cotarelo (@ramoncotarelo) 7 de septiembre de 2018
Hoy @Albert_Rivera -yendo a TV3 y entrevistado por Lídia Heredia- ha salido de la zona de confort a la que es acogido en los medios panfleteros del régimen neofranquista español, de ahí esa pataleta irritante resultado de su inseguridad ante la veracidad del rigor periodístico. pic.twitter.com/QCdhuSau6h
— Sergi Pinkman (@sergipinkman) 7 de septiembre de 2018
Por la tarde, el Consejo Profesional de Informativos y el Comité de Empresa de TV3 rechazaron las acusaciones de Rivera. Según los trabajadores de TV3, es "falso" que TV3 mienta. En su respuesta, Consejo y Comité acusaron a Rivera de pretender que se le hiciera una pregunta determinada (una manipulación de las palabras del líder de Cs) y exigieron que intervenga para evitar que en las manifestaciones convocadas por el partido se produzcan agresiones como la sufrida hace una semana por un cámara de Telemadrid (que recibió dos golpes tras agredir él mismo a un manifestante).
Al comunicado se sumaron Núria Llorach, la vicepresidenta de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales, y el director de TV3, Vicent Sanchís, que pidió "responsabilidad, rigor y respeto". Algo paradójico si se tiene en cuenta que fue el mismo Sanchís, blanco habitual de las críticas por el sectarismo extremo de la cadena, el que reconoció durante una entrevista con la periodista francesa Sandrine Morel, autora del libro En el huracán catalán, que TV3 "debe representar a la mayoría social del país y la mayoría social del país es independentista".