Los rostros serios, circunspectos, con los que el candidato a la investidura designado por el Rey, Pedro Sánchez, y el presidente del PP y líder de la oposición, Pablo Casado, han arrancado su reunión servían como adelanto de lo que estaba por venir. Tras apenas cuarenta minutos de reunión, así lo ha certificado el dirigente popular, posteriormente, en rueda de prensa: "Nadie entendería que el PP facilitase un Gobierno comunista con Podemos".
Casado ha explicado el contenido del encuentro reiterando, por activa y por pasiva, su negativa a apuntalar la investidura de Sánchez. ¿El motivo? El socialista "no va a romper con Podemos y no quiere nada del PP que no sea la abstención", ha incidido Casado. "Solo se nos ha planteado la oferta de que nos abstengamos. ¿Esta es la única oferta que se hace al PP? Hasta 5 veces se lo he preguntado y me ha dicho que sí".
Sin embargo, no todos son noes por parte de los populares. Sobre la mesa, hasta once acuerdos de pactos de Estado para garantizar la gobernabilidad y llevar a cabo "una legislatura tremendamente exitosa para España". Siempre y cuando consiga ser investido, claro. Y la vía para lograrlo, según opina Pablo Casado, puede pasar por no depender de ERC y sin tener que llegar a la claudicación del PP: a través de Ciudadanos.
Las alternativas a ERC
A ojos populares, existen dos alternativas. Una: un gobierno en solitario del PSOE con los apoyos que ya intentó en 2016 -Unidas Podemos y Ciudadanos-. Dos: un gobierno en solitario con apoyo de los partidos de izquierda y regionalistas, con la abstención de los de Arrimadas. "La responsabilidad del PP es darle salida al callejón en el que se encuentra Sánchez. Y tiene estas dos", ha detallado.
"Sánchez ya ha unido su destino a Podemos pero yo lo que le he planteado hoy es no unirlo a ERC. Aún está a tiempo. Tendemos la mano a la estabilidad, responsabilidad y gobernabilidad, pero no podemos apoyar un gobierno con Podemos porque el PP no tiene que ver nada con esa propuesta", ha manifestado Casado. "Nos lo tomamos casi casi como un insulto que hagamos vicepresidente a un partido comunista y populista".
Casado aduce que no se trata de un tema "personal", sino que sería "letal para España y un suicidio para el partido, pero lo segundo es más irrelevante". "Nadie en España entendería que el PP facilitara un gobierno con Podemos. Sería como pedirle a Pedro Sánchez que facilitara un gobierno del PP con Vox en la vicepresidencia", ha ejemplificado.
Así, y tal y como lo ve el líder de la oposición, el candidato a la investidura "sólo está esperando el certificado de la cárcel para lacrar el acuerdo que, libre y voluntariamente, ha elegido, que excluye al PP y, por eso, lleva evitando el contacto desde hace un mes".
El 'no' a la vía Arrimadas
"Se ha intentado que el PP sea una coartada para una decisión libre y voluntaria tomada después del 10-N", ha ahondado Casado. "El PP no puede ser un partido que blanquee ese pacto del PSOE y Podemos porque, si algo me ha demostrado este simulacro de acercamiento al PP, es que Sánchez está instalado en el no es no a cualquier alternativa que no pase por Podemos".
Sobre la otra opción sobre la mesa, la llamada vía 221 que propone la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, Casado ha aducido que no la "entiende". "Es curioso que ahora intente proyectar la responsabilidad sobre el PP quien tuvo en su mano que no se repitieran las elecciones", ha azuzado.
Pero, como Sánchez no se plantea faltar a su palabra con Pablo Iglesias, el presidente popular ha creído que la "vía Arrimadas es una buena propuesta para contestarles a ustedes [por la prensa]". "Por respeto, yo no juego de farol. Sólo hay dos alternativas por las que no puede depender de ERC y pasan por Ciudadanos". "Me encantaría que no dependiera de Podemos, pero España ya ha homologado a Podemos. Mi obligación es evitar que dependan de los independentistas".
Un PSOE "fuera de la Constitución"
A estas alturas, cree Casado, "el problema no es ERC, Podemos, JuntsxCat o Bildu… el problema es que, para Sánchez, son socios homologables de coalición o investidura. Los que les han llamado para negociar una investidura son los del PSOE". Y ha mostrado su preocupación, especialmente por las conclusiones del congreso de este fin de semana del PSC.
"Cuando el PSOE salga de la deriva y vuelva a la centralidad, al respeto al sistema de la Transición y al orden constitucional, ahí nos encontraremos", ha comentado el dirigente popular, que ha vuelto a acusar a los socialistas de estar "fuera de la Constitución". "¿Acaso las supuestas 8 naciones están en la Constitución?", se ha preguntado. "¿Quién ha dicho todo eso? El PP o el PSOE? Se ha dicho que España es plurinacional y que Cataluña es una nación. ¿Pero cómo se puede pedir al PP que participe de la investidura de ese gobierno?".
El líder de la oposición también ha planteado por qué "el PP es el causante de todos los males de este país" cuando, "simplemente", están "denunciando el cordón sanitario, el pacto del Tinell, la declaración de Granada y la huida hacia delante de un PSOE que ya no se reconoce frente al espejo de la labor que tuvo en la Transición". "Lo mínimo es que no nos exijan que seamos cooperadores necesarios de esta deriva que está fuera de la Constitución. No lo digo yo, lo votaron ellos, el PSC".
Así las cosas, Casado ha reclamado que a su formación no se le pida "hacer un desbordamiento de facto" de la Carta Magna y que, "encima tengamos que estar de palmeros, absteniéndonos, para que el señor vicepresidente Iglesias lleve a cabo una reforma que para nosotros es absolutamente inadmisible". "¿Por qué esperan que el PP vaya contra su hemeroteca, su programa, el minuto de oro del debate, de la lógica de contrapesos, alternativas y oposición, si hay otras alternativas? ¿Por qué ese intento de poner esa responsabilidad sobre el PP que Sánchez no pide, que ya dijimos que no íbamos a hacer y que no es necesaria?".
"El PP estará para dar esperanzas y certidumbres", ha finalizado. Sobre las opciones que quedan sobre la mesa para que la investidura, Casado ha indicado que espera que Sánchez las explore. "Tengo la sensación que no va a hacerlo. Me voy más preocupado de lo que entré. Lo tengo que lamentar como líder del PP y como contribuyente y padre de dos niños pequeños, porque esa España no me gusta".