Pablo Iglesias afirmó con rotundidad el pasado miércoles, durante el debate de todos los candidatos a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, que fue la Vicepresidencia Segunda de Derechos Sociales la que daba las indicaciones a la Unidad Militar de Emergencias (UME) de "cuáles eran las residencias que había que desinfectar". Después de amenazar con desvelar los mensajes y sólo tres días después, este sábado dio marcha atrás y afirmó en el programa laSexta Noche que se "coordinó con la ministra Margarita Robles" para enviar a la UME a las residencias de ancianos.
"Tengo en mi teléfono los WhatsApp con la ministra de Defensa en días en los que estuvimos colaborando mucho", aseguró y añadió que "Julio Rodríguez tramitaba las más de 4.400 solicitudes para la desinfección por parte de la UME".
La UME se convirtió en un arma fundamental en la batalla contra el coronavirus. Sus integrantes resultaron esenciales junto al Ejército de Tierra, el Ejército del Aire y la Armada Española para luchar contra el virus en todo el territorio.
Fuentes del Ministerio de Defensa han desmentido categóricamente que fuera Iglesias, en su etapa como vicepresidente, el encargado de dar las órdenes a la UME en la Operación Balmis, dirigida a actuar contra la pandemia. "Los militares sólo reciben órdenes de la ministra de Defensa y de la cadena de mando", aseguran esas fuentes.
Amenazas de muerte
Pablo Iglesias ha explicado que las amenazas de muerte que han recibido Fernando Grande-Marlaska, la directora de la Guardia Civil y él mismo "son unas amenazas serias".
"Me llamó personalmente el ministro del Interior y me confirmó que no son como las que recibimos todas las semanas, que esto es otra cosa", ha confirmado el líder de Unidas Podemos en laSexta Noche.
Iglesias, que confía en que haya detenciones por estos hechos, ha aseverado que "esto se tiene que parar ya". "Estamos preocupados, atacaron una sede nuestra con cócteles molotov y no ha habido ninguna detención", ha apuntado el candidato a las elecciones del 4M.
"Estamos viviendo una situación de incremento de la tensión, de incremento de la violencia que es enormemente peligrosa", ha advertido también el líder de la formación morada, que sostiene que "el fascismo está poniendo en peligro nuestra democracia. Esto los demócratas lo tenemos que parar", ha sentenciado.