Óscar Puente: "Es más fácil veranear siendo de derechas, la izquierda sólo puede hacer senderismo"
"Se me cayó la toalla un día que Susana Díaz me llamó para echarme la bronca" / "Estoy pensando en hacer un museo con mis bañadores" / "No iría a una playa nudista. Ya lo probé y no disfruté ni un segundo".
25 agosto, 2021 02:25Ya es verano para Óscar Puenting (Valladolid, 1968). Ahí llega el portavoz del PSOE con el arnés puesto. Porque se va a lanzar. Tiembla, una vez más, Ferraz.
¡Qué espectáculo nos hurta el socialismo todas las semanas, cada vez que aparta a este abogado y actor de teatro de las ruedas de prensa! Sánchez quiso hacerlo ministro, pero él prefirió -para desgracia de los telediarios- "ser alcalde de mi pueblo".
Si es política, arremete contra Alfonso Guerra y Felipe González al más puro estilo Braveheart. Pecho descubierto. Si es verano... también pecho descubierto. Como en Los vigilantes de la playa.
Dice que está pensando en hacer un museo con sus bañadores, se abre a brindar con sangría y dedica unas palabras a su primer amor. Ah, y aquel día, cuando se le cayó la toalla en mitad de...
¿Cuáles han sido sus chanclas más horteras?
¿Hay alguna chancla que no tenga un punto hortera?
¿Y el bañador que más le costó tirar?
Los conservo todos. Estoy pensando en hacer un museo.
Un lugar en el que no volvería a veranear jamás.
Rusia.
El destino de veraneo que más feliz le ha hecho.
Laredo (Cantanria). Cinco veranos de juventud consecutivos que no volverán.
¿Qué le diría hoy a su primer ligue de verano?
"Nunca te olvidé".
Su mayor locura en una playa.
Esto va en horario infantil, ¿no?
¿Y en la montaña?
Hacer el helicóptero esquiando cuando las piernas me propulsaban. Ahora me conformo con bajar sin hacerme daño.
¿Se pondría mascarilla en una playa nudista?
No iría a una playa nudista. Ya lo probé y no disfruté ni un segundo.
Lo mejor y lo peor que le ha pasado yendo de campamento.
Lo mejor, las charlas junto a la hoguera. Lo peor, una constante incomodidad. Siempre sucios, poco descanso...
El sitio más incómodo en el que se le ha caído la toalla.
En el balcón del Ayuntamiento, una vez que Susana Díaz me llamó para echarme la bronca.
¿Es más fácil veranear siendo de derechas?
Sin duda. El mar y la montaña deben ser patrimonio, también, de la derecha. Los de izquierdas sólo podemos ir al pueblo a hacer senderismo.
Una canción del verano que todavía escuche.
Free, de Ultra Naté.
En el verano se compran cosas absurdas. ¿Qué compra usted?
Soy poco impulsivo comprando. Así que no suelo comprar cosas absurdas.
¿Alguna vez ha comprado en el top manta?
Algún DVD cuando mis hijas eran pequeñas para aplacarlas en los viajes largos.
¿Le gusta la sangría?
Desde luego. Aunque hay sangrías y sangrías.
Lo peor del verano del político es…
La imposibilidad de desconectar.
Lo mejor del verano del político es…
Encontrar un rincón para vivir con normalidad.
¿Alguna vez ha llegado a las manos con alguien?
Si dejamos aparte el colegio, jamás. En parte porque soy muy grande y eso disuade a que se metan conmigo.
Qué libros va a aprovechar para terminar.
Estoy a punto de acabar Manual de Escapología, de Antonio Pau. Pero el “a punto” me está durando una eternidad. Y no porque el libro no sea delicioso. De este verano no pasa.
¿Va a pasar algún día con un adversario?
Puede ser. Tengo muy buena relación con muchos de ellos.
¿De quién no quiere saber nada hasta septiembre?
De nadie en especial. No tengo manías ni rencores hacia nadie. Pero me gustaría perder de vista a mi gabinete una temporadita.