Sánchez estudia nuevas reglas para controlar al CNI pactadas con su directora
Pedro Sánchez comparece el jueves en el Congreso, con propuestas para mejorar el control de los servicios secretos en un proyecto de ley.
21 mayo, 2022 04:05Noticias relacionadas
El Gobierno cree que, pese a las dificultades, va superando la grave crisis provocada por el espionaje del CNI a líderes independentistas, aunque aún le quedan algunos episodios y a pesar de dejarse muchos jirones de piel en el camino. O al menos, considera que ha logrado enfriarlo.
Entregó la cabeza de la directora del CNI, dio entrada a sus socios parlamentarios a la Comisión de Secretos del Congreso y dio explicaciones a puerta cerrada, tuvo un informe exculpatorio del Defensor del Pueblo y se incluyó en el grupo de víctimas por el espionaje a Pedro Sánchez, Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska.
Le queda la comparecencia del presidente del Gobierno en el pleno del Congreso el próximo jueves, y el debate y votación de una comisión de investigación sobre las llamadas "cloacas".
Para ello, el Ejecutivo valora la posibilidad de ofrecer en la comparecencia de Sánchez en el Pleno cambios en la regulación del CNI, para favorecer las medidas de control. Esa opción ya ha sido tratada por el Gobierno con la nueva directora del CNI, Esperanza Casteleiro.
La idea que valora es acudir al Congreso con este compromiso, junto al de desclasificar los documentos que el juez de la Audiencia Nacional pueda solicitar en la investigación del espionaje a los miembros del Gobierno.
Fuentes de Moncloa aseguran que esa reforma legal iría en la línea apuntada por el Defensor del Pueblo, para limitar en lo posible el uso de métodos "más invasivos" como Pegasus y para mejorar el control y la transparencia.
El Gobierno se ha comprometido a presentar antes de verano un proyecto de ley de secretos oficiales y ahí podría incluir retoques en las dos normas que regulan los servicios secretos: la del CNI y la del control judicial del centro.
Este miércoles, el presidente del Gobierno se limitó a asegurar en el Congreso: "En el programa normativo de este Gobierno está planificada la modificación de la Ley de Secretos Oficiales, y el Gobierno está dispuesto a escuchar cuantas propuestas sean necesarias. Por ejemplo, la que usted ha planteado de reforzar precisamente las garantías judiciales en aras de mejorar la confianza. Una confianza que desde luego no pone en cuestión el Gobierno de España en el trabajo que están realizando, en este caso, los servidores públicos del Centro Nacional de Inteligencia".
Ley de Secretos
Esa futura ley de secretos oficiales es objeto de controversia del Gobierno con sus socios parlamentarios. El PNV presentó una proposición de ley en 2019 y ya ha sufrido 70 ampliaciones del plazo de enmiendas, porque el PSOE rechaza someterla a debate y votación. Finalmente, Moncloa ha anunciado su propio proyecto de ley para su debate en los próximos meses.
No obstante, si el Gobierno aceptara finalmente abordar esta norma, tendría dificultades para sacarla adelante. Porque sus socios parlamentarios plantearían ir mucho más allá. Por ejemplo, para que ninguna de las instancias de seguridad del Estado pueda usar el sistema Pegasus.
El PNV presentó esta semana una propuesta de reforma de la ley del CNI en la que, por ejemplo, se deja en manos de un tribunal el control de las escuchas, en lugar de que sea un sólo juez, como ocurre hasta ahora.
Por otra parte, fuentes del Gobierno explican que no ha habido ningún tipo de conversación sobre el espionaje con Marruecos, Estado al que apuntan los indicios sobre la intromisión en el terminal del presidente y de los ministros de Defensa e Interior.