Aragonès repite el boicot a la Corona: planta al Rey en el MWC y muestra su sintonía con Sánchez

Como viene siendo habitual, Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, ha plantado este domingo a la Corona en la recepción oficial previa a la cena que ha servido de pistoletazo de salida del Mobile World Congress de Barcelona. El dirigente de ERC se ha ausentado para no estrechar su mano con el jefe del Estado. 

No obstante, después ha compartido mesa y mantel con él. Con quien sí ha mostrado complicidad Aragonès es con Pedro Sánchez. El presidente del Gobierno y el de la comunidad catalana han departido amistosamente en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, donde ha tenido lugar la cena de bienvenida a los asistentes del Mobile. 

El encuentro entre Aragonès y Sánchez se produce justo cuando ERC trata de amarrar los apoyos suficientes para sacar adelante los presupuestos autonómicos en el Parlament de Cataluña. En las últimas semanas, se han intensificado las negociaciones con el PSC de Salvador Illa. 

[Sánchez anuncia la creación de un modelo de lenguaje de inteligencia artificial en español y lenguas cooficiales]

De la misma forma, republicanos y socialistas han logrado acercar posturas para sacar adelante la ley de amnistía en el Congreso de los Diputados. Actualmente, el escollo para conseguir que salve el trámite parlamentario es el veto de Junts, que exige incorporar nuevas enmiendas y, hace semanas, votó en contra del dictamen final de la norma. 

En la cena del Mobile de este año, la novedad ha sido la presencia del alcalde de Barcelona en el saludo oficial. El socialista Jaume Collboni no ha tenido inconveniente en colocarse con las autoridades para recibir al Rey. Se trata de una novedad porque su antecesora en este puesto, Ada Colau, siempre que pudo plantó al monarca. 

Junts también planta al Rey

Aragonès, pese al desplante a Felipe VI a su llegada, después sí que ha mencionado al monarca cuando le ha tocado pronunciar su discurso y ha hecho el repaso de cortesía de las autoridades presentes en el acto. 

Quienes también han dado plante al Rey en el saludo oficial han sido los representantes institucionales de Junts presentes en el acto. Como la presidenta del Parlament, Anna Erra. Y todo ello, a pesar del discurso el Gobierno sobre la necesidad de impulsar la amnistía para propiciar el reencuentro entre España y Cataluña.  

A partir de este lunes, tendrá lugar en Barcelona la decimonovena edición del Mobile World Congress, una de las ferias tecnológicas más importantes del mundo. 

En la cena que se ha celebrado este domingo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la creación de "un modelo de lenguaje de inteligencia artificial (IA) entrenado específicamente en español y el resto de lenguas cooficiales", que se será de código abierto.

Por su parte, el Rey ha reconocido que es "un placer regresar a Barcelona y hacerlo para una ocasión como ésta, en la que la ciudad se convierte durante unos días en el centro internacional de las tecnologías móviles", tal y como lo corroboran las "cifras que lo acompañan".

En su discurso, Felipe VI ha recordado que, para los próximos días, se esperan "más de 95.000 visitantes y dos mil quinientas empresas expositoras". Unas cuentas por las que ha querido dar la "enhorabuena" a los organizadores: "No es fácil superarse todos los años y vosotros lo estáis consiguiendo".

El Rey también ha querido reflexionar sobre la rapidez en la que avanza la tecnología móvil: "La velocidad de la innovación es tan rápida que la inteligencia artificial ya ha llegado a nuestros móviles, aunque se desconoce todo su potencial y capacidades; prácticamente, mensualmente descubrimos con asombro mucho más sobre lo que podemos esperar lograr con la IA y nos preguntamos qué debemos hacer para estar preparados y disminuir nuestras preocupaciones".

En ese aspecto, ha asegurado que "el gran ritmo de cambio y la introducción de innovaciones disruptivas pueden ser bastante abrumadoras". Especialmente, ante "la falta de conocimiento", por eso añadió: "La transformación digital se ha convertido en un desafío que todos los ámbitos" de la "economía y gobernanza deben afrontar".