El separatismo pierde el 5% de sus votos y cae 13 escaños: obtiene su peor resultado desde 1980

Los secesionistas suman hoy 61 escaños, 13 menos que tras los últimos comicios y un 5% menos del voto. Por el camino se han dejado cerca de 100.000 papeletas. Apenas suman un 43,1%, aunando todas las fuerzas de esa esfera política. Enfrente, las fuerzas constitucionalistas han obtenido un 54,5%.

En los anteriores comicios catalanes, el separatismo obtuvo 74 escaños: 33 de ERC, 32 de Junts y 9 de la CUP. Eran las primeras elecciones tras la sentencia del procés. Entonces, los partidos contrarios a la secesión (PSC, PP, Vox y En Comú) alcanzaron 61 representantes.

La situación se ha revertido, ya que ERC, Junts y la CUP, junto a la recién nacida Aliança Catalana, tan solo llegan a esos 61 que sumaban sus rivales en 2021. 

En 2021 votaban a ERC, Junts o la CUP 1.445.744 catalanes. Ahora, 1.346.213 personas han escogido esa opción, lo que refleja una notable caída que venía ya anticipada en los sondeos.

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La victoria de Salvador Illa para el PSC, el fuerte crecimiento del PP, la resistencia que mantiene Vox, y un leve descenso de Comuns. Esos cuatro partidos suponen 1.611.015 votos y 74 escaños, precisamente la cifra alcanzada por el independentismo en las anteriores elecciones autonómicas.

Este resultado es también el mejor que obtienen las fuerzas contrarias al separatismo desde 1980. El electorado ha optado por apoyar a fuerzas que quieren que Cataluña siga siendo parte de España.

El golpe más severo se lo lleva Esquerra Republicana. En 2021 el candidato Pere Aragonès obtuvo 33 escaños que le abrieron las puertas de la Generalitat. 605.581 electores confiaron en su propuesta (21,29 %). Ahora cae hasta los 426.000 votos, el 13,68% del total.  

El partido de Pere Aragonès y de Oriol Junqueras ha sido la tercera fuerza más votada en el conjunto de Cataluña y en las cuatro provincias, perdiendo la segunda plaza en todos los casos.

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En su discurso de este domingo tras saberse los resultados, el presidente en funciones de la Generalitat, Pere Aragonès, descartó formar Govern junto al PSC y Comuns.

Aragonès añadió que es el turno de PSC y de Junts para "liderar una nueva etapa" en Catalunya.

Junts ha incrementado sus apoyos, pero de forma muy precaria. Hace 3 años, el partido del prófugo Carles Puigdemont conseguía 32 representantes en el parlamento autonómico, con 570.539 votos y el 20% del electorado. Ahora crece hasta los 673.645 votos, que se traducen en 35 escaños. 

También la CUP ve reducidos sus apoyos, de 9 escaños a 4. Entonces sumaba 190.000 votos y ahora se queda en 118.000.

PSC arrasa en Barcelona

La irrupción de Aliança Catalana, una fuerza secesionista pero del ámbito de la extrema derecha, otorga a este bloque otros 118.212 votos, pero sus postulados en la agenda social y en materia migratoria propician que ni ERC o la CUP los consideres como posibles socios. De hecho, Puigdemont, Aragonès y la CUP se habían comprometido por escrito a no pactar con la ultraderechista de Sílvia Orriols.

El secreto de la victoria del PSC de Salvador Illa tiene mucho que ver con que ha arrasado en el tradicional cinturón rojo de Barcelona a costa del retroceso de ERC, que en las elecciones de 2021 fue segunda fuerza en los principales municipios.

Los socialistas se han impuesto con holgada mayoría en casi todas las poblaciones de la corona metropolitana, con pocas excepciones como Sant Cugat del Vallès (Barcelona), tradicional feudo del nacionalismo catalán donde se ha impuesto Junts con el 28,6 %, o Sant Quirze del Vallès, donde los posconvergentes han logrado el 27,2 % de apoyos.

ERC, que en su apuesta por ampliar su base electoral en una zona históricamente socialista llegó a pisar los talones al PSC en los comicios de 2021, ha conservado la segunda posición en escasas poblaciones del área metropolitana -El Prat de Llobregat es una de las excepciones- e incluso en algunas se ha visto superada por Junts.

Así, el PSC de Salvador Illa ha ganado por primera vez unas elecciones catalanas en votos y escaños, al obtener 42 diputados.

La jornada electoral también ha facilitado el sorpasso del PP a Vox. Es el partido que más votos ha subido en Cataluña estas elecciones, con 232.000 apoyos más, hasta lograr los 342.000 de la mano de Alejandro Fernández.

El PP era la octava fuerza en 2021, con tres diputados, y ahora es la cuarta, con 15 escaños. Parte de ese éxito viene de haber desbancado a Vox en la segunda posición en algunas grandes ciudades del área metropolitana, como L'Hospitalet de Llobregat, Santa Coloma de Gramenet o Badalona.