Pedro Sánchez, este viernes, en un mitin en Los Alcázares, Murcia.

Pedro Sánchez, este viernes, en un mitin en Los Alcázares, Murcia. Efe

Política ELECCIONES EUROPEAS

El PSOE dice que crece con el 'voto útil', atrae incluso a electores nacionalistas y descarta un 'efecto Begoña'

Euforia en Moncloa por los resultados de sus estudios electorales en el arranque de la segunda semana de campaña.

1 junio, 2024 03:46

A una semana de las elecciones europeas del 9 de junio, el PSOE vive en una especie de euforia, en función de los datos que arrojan sus estudios demoscópicos.

Explican que en el mes de abril sus encuestas mostraban ventajas para el PP que no bajaban de siete puntos y llegaban en ocasiones a los 10. Desde entonces, detectan una tendencia sostenida a recortar esta diferencia, hasta el punto de llegar a la segunda semana de campaña electoral con datos de empate técnico, que puede decantarse en favor del PP o en favor del PSOE, pero siempre con ventajas mínimas.

Entienden los socialistas que todo lo que sea bajar de cuatro puntos de ventaja del PP ya es un éxito, pero ven ahora incluso la opción de ganar y dar un golpe político trascendente al liderazgo de Alberto Núñez Feijóo. Esa percepción coincide en el tiempo con la imagen que transmite el PP, reduciendo sus expectativas para pasar de una victoria clara a simplemente una victoria.

Moncloa y el PSOE aseguran estos días que han conseguido un efecto importante a su favor: reunir casi todo el voto útil frente a la derecha y la ultraderecha. Es decir, crecer a costa de los partidos nacionalistas, independentistas y de la propia izquierda a la izquierda del PSOE.

Se basan en el análisis objetivo de que los ciudadanos cada vez diferencian más en el tipo de elecciones. Lo hicieron discriminando entre las municipales y autonómicas de mayo de 2023 y las generales de julio del año pasado.

Para eso buscaron cómo convencer a anteriores votantes de Sumar, Podemos, ERC, BNG, Bildu y hasta Junts de que en esta ocasión es el voto al PSOE el que consigue frenar a PP y Vox y también al resto de la ultraderecha europea.

Pedro Sánchez consiguió fijar ese marzo con su retiro de cinco días del mes de abril, luego insistiendo en la idea del freno a la ultraderecha y luego con la ayuda imprescindible de Vox con el acto de Madrid y el consiguiente conflicto diplomático con Argentina, fijando la imagen de Javier Milei como la encarnación del "mal de la extrema derecha que hay que parar".

Se completa, además, con los pasos respecto a Palestina y Ucrania. Moncloa explica que estos dos asuntos de política exterior siguen la corriente de una población sensibilizada y favorable. Especialmente, lo que se refiere a Palestina, sobre lo que Sánchez ha fijado el margen de la elección entre "el reconocimiento del Estado o el genocidio". Y en ese marco, en el que la política exterior pasa a ser política interior y dominada por las emociones, el PSOE logra atrapar el voto de electores que proceden de los partidos independentistas y de izquierdas.

Feijóo y Meloni

De paso, se debilita a Alberto Núñez Feijóo al presentarlo como un líder insolvente en asuntos de política exterior. Más aún con sus palabras comprensivas con la ultraderechista italiana, Georgia Meloni.

Entienden que Sumar no ha conseguido marcar una posición propia en esos asuntos, pese a sus intentos por diferenciarse del PSOE, y eso les favorece. En estas elecciones no se trata de completar mayorías, sino de sacar un buen resultado por sí solos.

En ese contexto, Moncloa ve con escepticismo la posibilidad de que la investigación judicial sobre las actividades de Begoña Gómez, porque entiende que no hay elemento alguno que pueda ser utilizado contra la esposa del presidente del Gobierno. No creen posible un "efecto Begoña Gómez" en los últimos días de campaña.

A una semana de las elecciones europeas del 9 de junio, fuentes de la Presidencia del Gobierno explican que el auto de la Audiencia Provincial de Madrid conocido esta semana elimina uno de los puntos sobre los que se basaba la acusación a Gómez: el referido al supuesto tráfico de influencias sobre el rescate a Air Europa.

Expresamente, los tres magistrados eliminan ese punto de la investigación desarrollada por el juez Juan Carlos Peinado. Ese asunto estuvo en el origen de las informaciones iniciadas por El Confidencial.

Queda el de la carta de interés o de recomendación firmada por Begoña Gómez para una empresa que luego resultó adjudicataria de un concurso del Ministerio de Economía. Y esta semana ha surgido el del software utilizado por la esposa del presidente del Gobierno y creado por grandes empresas como Indra, Telefónica y Google.

Sobre las cartas, el entorno del presidente del Gobierno explica que no hay nada ilícito, puesto que no llegaron a estar presentes esos escritos en la decisión última de la mesa de contratación de Red.es, el organismo del Ministerio de Economía, que adjudicaba a una UTE en la que participaba la compañía del empresario Carlos Barrabés.

Moncloa sigue aferrándose al informe detallado de la UCO, en el que los agentes de la Guardia Civil explican no haber encontrado elementos delictivos. Ese informe ha sido desoído por el juez instructor de las diligencias y por la propia Audiencia Provincial de Madrid.

'Caso Begoña'

Las fuentes oficiales se resignan eso sí a que el caso siga abierto antes de las elecciones europeas del 9 de junio y a que pueda seguir dando munición al PP en la campaña electoral.

Además, el presidente del Gobierno insiste en su tesis del “fango” en referencia a las informaciones publicadas en los últimos días sobre la actividad de Begoña Gómez en la cátedra extraordinaria de la Universidad Complutense.

El Confidencial informó de que Begoña Gómez negoció que Indra, Telefónica y Google hicieran gratis un software para su Máster. Según el citado medio, la colaboración de estas tres empresas con la mujer del presidente del Gobierno se articuló como un proyecto altruista al tratarse de una entidad "sin ánimo de lucro" y de carácter educativo. Y que la esposa del presidente registró esa plataforma a su nombre.

Fuentes de Moncloa matizan que, en realidad, esa plataforma o software nunca llegó a estar operativo, además de que estaba destinado a ser ofrecido a pequeñas empresas, pero sin ánimo de lucro.

Según esta versión oficial, Begoña Gómez dirige una cátedra extraordinaria, para la que reúne los requisitos previstos en el reglamento de la Universidad Complutense. No cobra de la universidad y la cátedra firma convenios con empresas con unos objetivos que cumplir, que incluyen dar formación, organizar eventos, hacer estudios de mercado o crear herramientas tecnológicas.

Para cumplir ese objetivo crearon una herramienta para medir el impacto en las pequeñas y medianas empresas de los ODS. Las grandes empresas que participaron lo hicieron probono, es decir, porque consideran que es una causa justa o razonable o porque creen que les interesa reputacionalmente, siempre según la versión oficial.

De esa forma se creó una URL que sólo contiene la citada herramienta. Sin embargo, nunca llegó a estar operativa y, en todo caso, era sin ánimo de lucro.

Moncloa explica que la esposa del presidente registró en la Oficina de Marcas y Patentes el nombre de la herramienta, la del software o aplicación. Y lo hizo Begoña Gómez en calidad de directora de la cátedra extraordinaria y, de hecho, el nombre coincide con el de la cátedra.