Mar Blanco afirma que "no queda nada del espíritu de Ermua" en el homenaje a Miguel Ángel Blanco

"El asesinato de mi hermano fue un acto salvaje que marcó un antes y un después en la Historia de España" ha dicho Mari Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco y senadora del PP, en un homenaje a su hermano organizado este miércoles por el partido en Ermua. Al acto ha acudido el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo.

La muerte de Miguel Ángel, ha recordado Mar Blanco, "no fue en vano, porque despertó la conciencia de toda una nación". "Consiguieron apagar su vida, pero no contaban con que se encendería un clamor imparable, el espíritu de Ermua, la política antiterrorista más exitosa desde la unidad y el consenso que marcó el principio del fin de ETA". 

Pero, "desgraciadamente", ha dicho, "veintisiete años después ya no queda nada del espíritu de Ermua". Hoy, ha asegurado, "los herederos de ETA siguen sin condenar su secuestro y asesinato, pero con más poder que nunca gracias al Gobierno de Pedro Sánchez, que ha decidido vivir de rodillas frente a Bildu en lugar de aislarles políticamente, como hicimos todos en el año 1997". 

Según Mari Mar Blanco, el Gobierno socialista "ha elegido el camino de blanquear a Bildu y su pasado manchado de sangre sin exigirle la más mínima condena, con la consecuente humillación a las víctimas". Un Gobierno que, ha dicho, "es el favorito de los presos de ETA". 

Además, ha recordado el Manifiesto por la Democracia que Sánchez firmó hace cuatro años junto a Bildu. "Un pacto de la vergüenza con aquellos que nos querían meter a populares y socialistas en el corredor de la muerte", ha afirmado Blanco.

El pacto con la izquierda abertzale, ha dicho la senadora del PP, "ha entregado Pamplona a Bildu y supondrá la expulsión de la Guardia Civil de Navarra y de Euskadi". Estas cesiones y pactos, ha añadido, "han posibilitado que en el País Vasco y en Ermua haya crecido el voto de los herederos de ETA". 

Mar Blanco también ha señalado que el Gobierno está "manejando los hilos de la fiscalía para obstruir el derecho a la justicia de todas las víctimas". Y se ha referido directamente al fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, que se ha "opuesto a que sea la Audiencia Nacional quien juzgue a los jefes de ETA por ordenar el secuestro y asesinato de mi hermano". 

Por eso, ha concluido, "cada año estamos aquí en Ermua, para preservar la memoria, la dignidad y la justicia". 

La "conciencia" de Sánchez

Feijóo, po su parte, se ha referido a la "conciencia" de Sánchez. "Nosotros estamos donde tenemos que estar, los demás sabrán, allá con sus conciencias, lo que hacen y el rédito político de lo que obtienen", ha dicho.

Además, ha afeado los pactos de investidura con Bildu del presidente del Gobierno, afirmando que "no hay ningún interés por ostentar cargos que suponga cercenar y enterrar, no solo a un cuerpo inerte y asesinado, sino a su memoria", en referencia a Miguel Ángel Blanco.

El líder del PP ha afirmado que el espíritu de Ermua "nos acompaña siempre" para "recordarnos cada día qué es lo correcto y lo incorrecto". "Cuando se producen a diario homenajes a los asesinos", ha subrayado, "se nos recuerda el deber moral de estar siempre con las víctimas".

El hecho de que "otros pacten con los herederos y beneficiarios del terror", ha continuado, "nos recuerda de forma permanente nuestro lugar con las víctimas, la razón, la verdad, la memoria, la ley, el Estatuto de Guernica y la Constitución".