Salvador Illa, más cerca de la Generalitat; la mayoría de Sánchez, más en el aire: Junts liga una cosa y otra

ERC se ha fijado el próximo miércoles, 31 de julio, como fecha límite para cerrar el acuerdo. Sin embargo, a medida que Illa se acerca a la Presidencia de la Generalitat, al presidente Pedro Sánchez se le complica el futuro de la legislatura.

El hasta ahora senador de Junts Josep Lluís Cleries ha reconocido ante los micrófonos de RNE que la decisión de su partido de tumbar el techo de gasto para los Presupuestos de 2025 responde, en buena medida, a la negativa del PSOE a permitir que Carles Puigdemont se convierta en presidente de la Generalitat.

En una entrevista en RNE, Cleries argumentó que en el Parlament "hay una mayoría suficiente independentista para plantar cara a un señor, Salvador Illa, que representa la aplicación del artículo 155".

"Pedro Sánchez ha de entender", abundó, "que Junts defenderá las posibilidades de que pueda haber un gobierno independentista para Cataluña, porque es nuestra opción: poder marcharnos de una España que no nos quiere ni nos ha querido nunca".

De este modo, Junts mantiene la amenaza de hacer inviable la legislatura del Gobierno de Pedro Sánchez, saboteando sus iniciativas parlamentarias en el Congreso como ocurrió el martes, si el PSOE cierra el camino para que Puigdemont presida la Generalitat.

La entrevista celebrada el miércoles entre Pedro Sánchez y el president Pere Aragonès en el Palau de la Generalitat sirvió para engrasar el acuerdo de investidura de Illa entre el PSC y ERC.

Durante su visita, Sánchez comprometió el traspasado de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y la línea 1 de Rodalies de Renfe (que se iniciará en 2025), además de varios acuerdos sobre financiación de becas y programas de investigación.

Pero la dirección de ERC, que tras su retroceso electoral en los comicios del 12-M se encuentra sumida en una profunda división, considera que estas concesiones son insuficientes.

La portavoz de ERC, Raquel Sans, recalcó este jueves que la Generalitat debe tener "la llave de la caja", para recaudar todos los impuestos que se pagan en Cataluña, con una fórmula similar a la del cupo vasco.

La fórmula que ha planteado el PSC, ya prevista en el Estatut, es la del "consorcio" fiscal, constituido por la Generalitat y el Ministerio de Hacienda, para recaudar todos los impuestos en Cataluña. Los militantes de ERC tendrán la última palabra para decidir si respaldan el acuerdo de investidura de Illa.

A la amenaza de Junts de bloquear la legislatura se suma la resistencia interna en algunos sectores del PSOE. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, reconoció este jueves sentir "vergüenza" de que su partido tenga que negociar con "los independentistas que hablan obscenamente, sin tapujos, de la caja, del bolsillo, de lo que es de todos".

Pero Page también envió un recado al presidente Pedro Sánchez al afirmar que algunos deberían "caerse del guindo" al comprobar que Carles Puigdemont "no paga, sólo cobra, fíjense cómo ha pagado la amnistía", añadió.

"Uno pone el telediario", comentó el presidente de Castilla-La Mancha, "y ve con asombro cómo Puigdemont está empeñado en hacer que la Moncloa sea la vivienda más cara de toda España".

García-Page quiso poner en evidencia así que el líder de Junts no es un socio fiable: exigió un elevado precio para apoyar la investidura de Pedro Sánchez, la aprobación de la ley de amnistía, pero una vez conseguida no está dispuesto a garantizar la legislatura.

Voto telemático de Puigdemont

Ya el pasado día 15, Page advirtió en Toledo que en ningún caso aceptará que se entregue a una comunidad autónoma "no ya las llaves de la caja común, sino ni siquiera una copia de las llaves de la caja común".

El barón socialista consideró entonces que otorgar a Cataluña un modelo de financiación diferenciado, como precio para facilitar la investidura de Salvador Illa, rompería el principio de solidaridad entre el resto de regiones.

A la espera de las próximas horas, que pueden ser cruciales para cerrar el acuerdo de investidura, el Parlament aprobó este jueves la reforma de su estatuto que permitirá a Carles Puigdemont y Toni Comín (quienes aún no se han podido beneficiar de la amnistía) ejercer el voto telemático desde el extranjero.

El acuerdo fue aprobado con los votos de PCS, Junts, ERC, los Comunes y la CUP. Esta reforma —que ha sido avalada por el Consejo de Garantías Estatutarias (CGE)— permitirá sortear el veto del Tribunal Constitucional, que había denegado a ambos fugitivos de la Justicia la posibilidad de votar desde el extranjero.

Senadores autonómicos

Sólo han votado en contra PP (que se propone recurrir el acuerdo de nuevo ante el Constitucional) y Vox. Por su parte, Alianza Catalana, la formación de la alcaldesa xenófoba de Ripoll, se ha abstenido porque no está de acuerdo con otro aspecto de la reforma, el que permitirá a la CUP formar grupo parlamentario propio, a pesar de no contar con los 5 diputados necesarios.

El Pleno del Parlament también aprobó este jueves la elección de sus ocho senadores de designación autonómica, como fruto del resultado de las elecciones del 12-M. De ellos, tres corresponden al PSC, tres a Junts, uno a ERC y otro al PP.

En concreto, los ocho nombres designados son Antoni Poveda, Núria Marín y Alfons García por el PSC; Teresa Pallarès, Eduard Pujol, Francesc Ten por Junts, Laura Castel de ERC y Lorena Roldán por el PP.