El presidente de Asturias, Adrián Barbón, este viernes en rueda de prensa.

El presidente de Asturias, Adrián Barbón, este viernes en rueda de prensa. EFE

Política ACUERDO PARA INVESTIR A ILLA

El paso al frente de Barbón contra el cupo catalán deja en evidencia la sumisión de Juan Espadas a Sánchez

El líder del PSOE no secunda a Page, Gallardo, Lambán y Barbón y mantiene una postura ambigua respecto del pacto entre el PSC y ERC.

3 agosto, 2024 02:51

El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, se sumó este viernes a las voces que, dentro del PSOE, rechazan frontalmente el pacto para investir a Salvador Illa que, pocas horas después, fue avalado por las bases de ERC por una ajustada mayoría del 53,5%. El paso adelante del sanchista Barbón deja aún más en evidencia la postura ambigua mostrada por el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas.

Hasta ahora, Espadas se ha limitado a señalar que no permitirá "ni agravios ni privilegios que perjudiquen a Andalucía", pero a la vez afirmaba que si el acuerdo del PSC y ERC lo avala el Gobierno de España es porque "preservará el interés general de Andalucía". 

Además traslada la responsabilidad al presidente de la Junta, Juanma Moreno, al que pidió que "espabile" para que la región tenga el mismo "techo de competencias y capacidad de financiación que Cataluña, atendiendo a nuestra singularidad y población".

Como ha informado EL ESPAÑOL, Andalucía recibe del actual sistema de financiación autonómico 212 euros por habitante menos que la media de regiones, según el análisis realizado por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF).

Por tanto, los andaluces resultarán aún más perjudicados en el reparto final, si se detraen del sistema común los recursos procedentes de Cataluña. 

Asturias, por su parte, recibe actualmente 154 euros por habitante más que la media regional, una situación que ahora peligra debido a los compromisos contraídos por el PSOE con ERC.

El pronunciamiento realizado por el presidente de Asturias, Adrián Barbón, tiene especial relevancia por varios motivos. En primer lugar, es (junto a García-Page y María Chivite) uno de los tres únicos barones socialistas que sobrevivieron a las elecciones autonómicas del 28-M.

Pero además, Adrián Barbón ha sido hasta ahora uno de los dirigentes regionales del PSOE más próximos al presidente del Gobierno. Tras la crisis interna de octubre de 2016, Barbón hizo campaña para que Pedro Sánchez recuperara la secretaría general del PSOE, en las primarias del 21 de mayo de 2017 en las que derrotó a Susana Díaz.

Cuatro meses después, Barbón se convirtió en el secretario general del PSOE de Asturias, tras el paso atrás de Javier Fernández, quien había encabezado la gestora que derrocó a Sánchez.

En su comparecencia de este viernes, Barbón rechazó cualquier pacto bilateral del Gobierno que otorgue a Cataluña un trato diferenciado.

Barbón, nada sospechoso de ser un disidente de Sánchez, ha decidido sumarse así a otras voces como las del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; el expresidente de Aragón, Javier Lambán, o el líder del PSOE de Extremadura, Miguel Ángel Gallardo, que se han mostrado especialmente beligerantes contra el pacto de financiación para Cataluña.

La vicesecretaria de Política Municipal del PP andaluz, Ana Mestre, aprovechó este viernes la división interna abierta entre los barones socialistas para reprochar a Juan Espadas que se muestre tan poco combativo, ante el "plan de independencia fiscal" de Cataluña fraguado por Pedro Sánchez, que a su juicio constituye "un jaque mate a la solidaridad y la igualdad" entre el resto de españoles.