El PP toma la iniciativa en la crisis migratoria y busca una mayoría en las Cortes ante el silencio de Moncloa

Después de un verano en el que se ha disparado la llegada de migrantes a nuestras fronteras, tal y como publicó EL ESPAÑOL, la formación de Alberto Núñez Feijóo busca liderar la iniciativa con un plan de acción que registró este martes en la Cámara Baja a través de una proposición no de ley. 

Se trata de una batería de medidas para poder atajar la crisis migratoria que el PP presenta como contrapunto a la "inacción" del Gobierno. En la dirección popular censuran que mientras las comunidades lidian con un incremento del flujo migratorio sin precedentes, el Ejecutivo, con Pedro Sánchez a la cabeza, mira hacia otro lado.

En las últimas semanas, la saturación por la llegada de migrantes a Canarias y Ceuta se ha disparado hasta alcanzar cotas nunca antes vistas para estas fechas. En este contexto, la Moncloa ha guardado silencio. De hecho, en la oposición han arreciado las críticas al presidente del Gobierno por no reunirse con el presidente de Canarias cuando ha pasado parte de sus vacaciones en Lanzarote, donde sí ha recibido a Salvador Illa. 

Al respecto, Sánchez dio ayer un paso al frente y anunció un encuentro con Fernando Clavijo para este viernes. El próximo martes, además, emprenderá una gira africana con parada en tres países del Sahel, de donde proceden buena parte de los extranjeros que arriban a España de manera irregular. 

No obstante, el Gobierno, más allá de la reforma de la Ley de Extranjería, que decayó en el Congreso por la falta de apoyos y que perseguía, entre otras cosas, establecer un reparto discrecional de menores migrantes entre las comunidades, ha eludido ofrecer una respuesta concreta a una crisis que alcanza números de emergencia.  

El PP, con el plan registrado este martes, quiere llevar la delantera. Si bien la figura de la proposición de ley apenas tiene significado simbólico, para instar al Gobierno a adoptar una serie de medidas, la intención real de los populares es abrir el debate en la Cámara Baja y armar una mayoría parlamentaria que obligue a Sánchez a actuar. 

La encrucijada del PSOE

Se da una circunstancia que pone al PSOE contra las cuerdas. Todo apunta a que la iniciativa presentada por los populares puede atraer el voto favorable de formaciones como Coalición Canaria, UPN o, incluso, el PNV. Pero despierta un rechazo total en Vox. Si el grupo socialista decide no apoyar la proposición del PP, se sumaría al partido de Santiago Abascal, ofreciendo una imagen insólita: PSOE y Vox compartiendo el mismo sentido de voto en una materia tan sensible como inmigración. 

En definitiva, el plan presentado ayer obedece a una táctica política que obliga al grupo socialista y al Gobierno a actuar. 

Los populares, entre el "buenismo" de la izquierda en inmigración y el "mensaje xenófobo" de Vox, plantean un ramillete de soluciones a la crisis que se ha recrudecido en los últimos meses. Muchas de las medidas que vienen incluidas en la proposición de ley son las que el PP exigió el Gobierno para brindar su apoyo a la reforma de la Ley de Extranjería. 

En concreto, el partido de Feijóo solicita que se declare la "emergencia migratoria en el ámbito nacional", para que las comunidades puedan recibir los recursos necesarios en la acogida de personas extrajeras a través de un procedimiento de urgencia. Otra cuestión que pone sobre la mesa el PP es la creación de un fondo de contingencia para que los territorios puedan sufragar los costes de la atención a menores no acompañados desde su acogida hasta su emancipación.  

De hecho, a fin de mejorar la tención de los menores migrantes en las comunidades, el PP pide al Estado que facilite infraestructuras que tiene "en desuso y cerradas". Para que, con los "recursos necesarios", se puedan adecuar y sirvan a la hora de "alojar y atender a los migrantes que llegan por vías irregulares". Al menos, hasta que se resuelva su situación administrativa. 

Si España es la puerta sur de Europa, el PP defiende en su iniciativa que el Ejecutivo solicite "a la Unión Europea la activación de los mecanismos existentes para ayudar a los Estados miembros que sufren de forma masiva la entrada de flujos migratorios".

En ese aspecto, la formación conservadora aboga por que España eleve la voz a las autoridades europeas y reclame "el despliegue de Frontex y de la Agencia Europea de Asilo, para ayudar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la vigilancia" de las costas y, especialmente, "ahora en la peligrosa ruta atlántica de la inmigración irregular hacia Canarias".