El Gobierno teme una derrota de Teresa Ribera y negocia levantar el veto al candidato de Meloni para salvarla
- Moncloa cree que Feijóo no ha resistido la tentación de desgastar al presidente, a costa de debilitar a la UE y a Von der Leyen.
- Más información: El Gobierno de la UE, en el aire hasta que Teresa Ribera explique qué hizo para prevenir y detectar la riada
El Gobierno empieza a temer la posibilidad de que el PP logre tumbar en Bruselas el nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta de la Comisión Europea. Y entiende que puede ser una dura derrota política de Pedro Sánchez, justo a propósito del tema sobre el que más éxitos ha cosechado y en el que mejor se ha desenvuelto: la política europea.
Tanto temor tiene el Gobierno a recibir ese revés, que Pedro Sánchez negocia con el PPE y con la propia Ursula von Der Leyen con una cesión importante: levantar el veto a Raffaele Fitto.
Fitto es el candidato en la Comisión de la ultraderechista italiana Giorgia Meloni, y ha sido designado por Von der Leyen como vicepresidente de Cohesión. Es decir, los socialistas están dispuestos a aceptar al italiano para salvar a Teresa Ribera.
Hace apenas una semana, Moncloa explicaba con seguridad que no había opciones de que su nombramiento fuera rechazado; ahora ha girado esta opinión.
Explican que no creían que el PP fuera capaz de llegar tan lejos después de haber tejido en Bruselas un complicado acuerdo entre las tres principales familias políticas europeas, es decir, populares, socialdemócratas y liberales.
El pulso de los populares puede forzar una crisis institucional sin precedentes si no puede ponerse en marcha la nueva Comisión Europea. Según la versión oficial, en ese caso se crearía una situación muy grave en vísperas del inicio de la segunda presidencia de Donald Trump, que avecina una confrontación entre Estados Unidos y la UE.
Aseguran, además, que Ursula von der Layen quedaría muy desautorizada y debilitada frente a Manfred Weber, líder del Partido Popular Europeo.
También supondría, según admiten esas fuentes, un grave revés para Sánchez, justo en un momento de máxima debilidad política.
Error de cálculo
Miembros del Gobierno hablan de "error de cálculo" por parte de Moncloa al no prever hasta dónde llegaría el PP. Alberto Núñez Feijóo ya había anunciado antes de la DANA que votaría en contra de Ribera, sugiriendo que incidirían en un supuesto conflicto de intereses con su marido, pero entendían que no llegaría a intentar convencer al Partido Popular Europeo para bloquear el nombramiento y tirar abajo la Comisión Europea.
Según explican, eso demuestra que, en realidad, el PP no cuestiona a Ribera por la DANA, porque ya había decidido hacerlo antes. Las consecuencias de la riada han dado excusas a Feijóo para ir más allá, según ese análisis.
"Es una respuesta desproporcionada de Feijóo, que busca tapar la responsabilidad de Carlos Mazón, sin importarle las consecuencias", aseguran fuentes del Gobierno.
Además, el líder del PP ha visto la ocasión de provocar una derrota política a Sánchez en un ámbito que casi siempre le ha sido adverso, por la fuerza del presidente del Gobierno en Bruselas.
Recuerdan en la Moncloa las dudas del líder del PP sobre política energética y lo que llamó el "timo ibérico" y la amnistía, y ahora, sostienen, pretende castigar a Sánchez dando la patada al tablero de la Comisión Europea.
Según el argumentario del Gobierno "la UE no puede permitirse una mirada miope en el delicado contexto geopolítico en el que se encuentra". "La decisión que hay que tomar no es 'si Ribera o si Fito': la decisión estratégica es alcanzar un consenso que proteja a Europa en un escenario internacional especialmente peligroso", añaden.
Explica que "lo relevante es qué hace la UE frente a una nueva Administración Trump que amenaza con aranceles a productos UE, guerra comercial con China, que desafía el orden multilateral, que mantiene una actitud de provocación, con un secretario de Estado de Energía abiertamente negacionista y procedente del petróleo, y el recrudecimiento de las hostilidades en Ucrania".
Y acusan al PP de buscar sumir a la UE "en la inestabilidad con vetos cruzados de mirada corta". "Para proteger a Europa, por responsabilidad, es imprescindible una Comisión en marcha, que no dependa de las maniobras de Trump y de la ultraderecha", señalan.