El coportavoz  y secretario de Organización de Podemos, Pablo Fernández, en una rueda de prensa.

El coportavoz y secretario de Organización de Podemos, Pablo Fernández, en una rueda de prensa. Europa Press

Política UNIDAD DE LA IZQUIERDA

Podemos ve "la mano del PSOE" en una nueva operación para unir el espacio a su izquierda con Yolanda Díaz al frente

La líder de Sumar lleva semanas afirmando que la izquierda alternativa debería pactar una sola lista de cara a las siguientes elecciones generales.

Más información: Irene Montero: "Mientras nosotras pagábamos un alto coste político, había quien del PSOE metía la mano en la caja"

Publicada
Actualizada

A mediados de enero, tras más de un año evitando el tema, Yolanda Díaz recuperó la idea de que la izquierda alternativa más allá del PSOE debía repetir la coalición que se presentó las elecciones del 2023, esa que terminó llamándose Sumar y que entonces tenía a Podemos como principal referencia. Aquello duró menos de cuatro meses, hasta que los morados abandonaron el grupo parlamentario y rompieron amarras con la vicepresidenta. 

Ahora, Podemos ve "la mano evidente del PSOE y de Pedro Sánchez" detrás de este cambio de parecer. Así lo ha señalado el portavoz y secretario de Organización de los morados, Pablo Fernández, quien sospecha también que podría estar encubriendo "un adelanto electoral" del que sólo sabrían ella y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

"Le pedimos que aclare si las palabras de Yolanda Díaz están motivadas por una voluntad de adelanto electoral ante la debilidad evidente de este Gobierno [...] Nos gustaría tener una aclaración expresa del presidente que nos explique estas declaraciones de Yolanda", ha apostillado el dirigente de Podemos.

La idea de reeditar la unidad a la izquierda del PSOE lleva sobrevolando el espacio político desde hace meses, principalmente por la presión de IU pidiendo primarias entre todos los dirigentes. La última vez que alguien propuso algo semejante fue Podemos en los meses previos al 23-J, una propuesta que terminó con Irene Montero vetada de las listas electorales y todos los puentes quemados entre ellos y Sumar.

"Yo voy a trabajar para que lo que ha pasado el 23J vuelva a pasar. Y quien no quiera estar ahí lo tiene que explicar", defendió Díaz el lunes pasado, tras meses esquivando el tema. "No hay ninguna circunstancia que pueda justificar no caminar juntas", agregó.

Podemos, por su parte, cree que el debate no es tanto ir juntos sino compartir objetivos, entre ellos no "subordinarse" al PSOE, como ocurre con Sumar. Irene Montero, de hecho, lo aclaró hace unas semanas en una entrevista con EL ESPAÑOL.

"Si compartimos el objetivo político, la forma en la que nos reorganizamos va a caer por su propio peso", aseguró la exministra. Y advirtió a Sumar sobre el PSOE, a quienes acusa de "haber dedicado muchos más esfuerzos [...] en intentar acabar con su izquierda y crear un sustituto que pudiese controlar".

Esta tesis es la que se defendió también durante las últimas elecciones europeas, la primera cita nacional en la que compitieron electoralmente y en la que Podemos, a pesar de presentarse en solitario, consiguió dos escaños. Sumar, que fue a las urnas junto a Izquierda Unida, los Comunes, Compromís, Más Madrid, Chunta, Equo y Més, sólo logró tres.

Una cosa es importante sobre el tema de la competición entre ambos. Aunque nadie lo reconozca, el debate se reduce hoy por hoy a dos realidades palmarias: la primera, que Podemos no se integrará en una candidatura que tenga a Yolanda Díaz como cabeza de lista indiscutida; y la segunda, que Sumar no aceptará unas primarias en las que, casi seguro, Irene Montero arrasaría como posible candidata.

Y en esas seguimos.