Prisión para una mujer que fingió ser un italiano enfermo para abusar de su amiga
- Tres magistradas condenan a 4 años y 8 meses de prisión por los delitos de abuso sexual y estafa.
- Tendrá que indemnizar a la mujer con cerca de 1.000 euros por los perjuicios.
- La Audiencia de Navarra mantiene a 'La Manada' en libertad con el voto de dos jueces a uno.
La Audiencia de Valencia ha condenado a una mujer que se hizo pasar por un italiano enfermo terminal de leucemia para abusar de su amiga a cuatro años y 8 meses de prisión por los delitos de abuso sexual y estafa.
La condenada conoció a la mujer de la que abusó en el salón de belleza de su madre, en Valencia. Allí, le pidió que aceptara a través de la red social Facebook la amistad de un supuesto amigo suyo italiano, Maximino.
La mujer "aceptó dicha solicitud de amistad y mantuvo contactos con él sin saber que en realidad era la propia acusada con la que estaba comunicándose", según la sentencia de las tres magistradas de la Sección Quinta de la Audiencia de Valencia.
Leucemia en fase terminal
Bajo la identidad supuesta de Maximino, la acusada hizo creer a su amiga que padecía leucemia en fase terminal y que se encontraba ingresado en el Hospital La Fe de Valencia, "circunstancias que aprovechó para convencerla de que le comprara dos teléfonos móviles de la marca Samsung Galaxy J7, valorado pericialmente en 299 euros y un Sony XP M4 Aqua, valorado pericialmente en 199 euros, ropa y un ventilador por un valor de 100 euros, indicándole que debía entregar dichos efectos a la acusada para que se los hiciese llegar a 'él'", según la sentencia.
La mujer accedió, compró todo y se lo entregó a su amiga, también cantidades de dinero que en total sumaban cerca de 500 euros.
Pidió que se tapara los ojos
Según la sentencia de las magistradas Begoña Solaz, Concepción Ceres y Marta Espuny, "las llamadas y contactos se sucedieron y la acusada consiguió concertar una cita con su amiga en el propio gabinete de belleza de la madre de esta última, día 15 de junio de 2016. La procesada, simulando la voz, le dijo a su amiga que debía esperarle con los ojos vendados, como así hizo, porque decía que no quería que lo vieran dado su estado de salud; y una vez dentro, la procesada, fingiendo en todo momento ser Maximino y aprovechándose de la circunstancia de que la amiga permaneció durante todo el tiempo con los ojos vendados, le introdujo un dedo en su vagina sin su consentimiento, momento en que la mujer chilló, lo que hizo que la procesada abandonara rápidamente el lugar", según la sentencia.
Por tales hechos, la Audiencia de Valencia la condena a 4 años y 8 meses de prisión por los delitos de abuso sexual con acceso carnal y estafa, respectivamente. También estará inhabilitada para el sufragio pasivo por el tiempo de la condena y tendrá que abonar 899 euros por los perjuicios sufridos más intereses legales y costes procesales.