La Audiencia investiga las fotos de presos de ETA exhibidas en una 'txosna' de las fiestas de Bilbao

Dichas imágenes aparecen ubicadas en la txosna (caseta) al lado de relojes que simbolizan la cuenta atrás para la vuelta a casa de los miembros de ETA encarcelados. De hecho, figuran al lado del lema Bada ordua (Es la hora, en euskera).

Todo ello consta en un auto del Juzgado Central de Instrucción número 6, que ha recibido la denuncia interpuesta por la asociación de víctimas Dignidad y Justicia (DyJ). Quien la preside, Daniel Portero, que también es diputado del PP en la Asamblea de Madrid, es hijo del fiscal Luis Portero, asesinado por uno de los etarras homenajeados en la caseta.

El reloj de cuco, a la entrada de la caseta. EL ESPAÑOL

Miembros de la comparsa Txori Barrote mostrando fotografías de presos de ETA. Covite

La txosna pertenece a la comparsa Txori Barrote y es una de las decenas de casetas instaladas en el Arenal vizcaíno con motivo de la Semana Grande de Bilbao, que durará hasta el próximo día 27.

El magistrado Joaquín Gadea, juez de refuerzo del Juzgado Central de Instrucción número 6, también ha encargado a los tres cuerpos policiales que le informen "sobre la pertenencia de los homenajeados con la exhibición de sus rostros, a la organización terrorista ETA". "Entre ellos, Harriet Iragi Gurruchaga, condenado por ser el autor material del asesinato de don Luis Portero García", precisa Gadea.

En su auto, fechado este jueves y al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el juez asume la petición de la Fiscalía y ordena que los tres cuerpos policiales investiguen las fotografías y el historial terrorista de los etarras homenajeados.

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Dignidad y Justicia, en la denuncia que ha dado origen a esta investigación, solicitó la retirada inmediata del mural en el que se exhiben los relojes y las fotografías. El juez, no obstante, esperará a recibir los informes de la Policía, la Ertzaintza y la Guardia Civil. La asociación de víctimas considera que los hechos podrían constituir un posible delito de humillación a las víctimas del terrorismo y sus familiares.

En la parte frontal de la caseta, encima de la puerta de entrada a la misma, aparece colocado un enorme reloj de cuco, que ya anticipa la temática del interior de la caseta: pedir la vuelta a casa de los presos etarras que aún están en prisión.

Los relojes, en el interior de la caseta, junto a la foto de los presos de ETA. EL ESPAÑOL

"La humillación a la que nos someten estas comparsas la venimos sufriendo desde 2007 y, año tras año, hemos solicitado su retirada inmediata, por el vilipendio que supone a las víctimas directas de los asesinos loados", reza la denuncia de DyJ.

Tal y como relata la asociación de víctimas, en esta ocasión, la caseta alberga relojes que marcan la "cuenta atrás" para la excarcelación de los presos de ETA. Una vez finalizó la política de dispersión y todos los reos fueron acercados al País Vasco y Navarra, la performance de apoyo ha sustituido al anterior mural con los kilómetros que separaban a cada preso de Euskadi por estos relojes.

"Vienen a representar el tiempo que les resta por salir de prisión y vienen a ser una continuidad de los actos de loa y recuerdo que año tras año lleva a cabo esta txosna (...) pues, hasta el año pasado, se exhibían las fotos de los presos de ETA y debajo el número de kilómetros que les separaban del País Vasco y Navarra", relata la denuncia de Dignidad y Justicia.

"Como este año ya no queda ningún preso de ETA fuera de dichas comunidades autónomas, el homenaje se ha hecho de este modo, con multitud de relojes acompañados de fotografías familiares de cuando los etarras eran niños, así como con un reloj con el nombre de cada preso", añade.