Temor a un atasco en la elección del presidente del CGPJ ante la demanda de que sea mujer progresista

"El mantra es que tiene que ser mujer y progresista", dicen fuentes del CGPJ. A esa idea responde que los vocales propuestos por PSOE-Sumar hayan propuesto solo tres candidatas y todas ellas magistradas del Tribunal Supremo: Pilar Teso, Ana Ferrer y Ángeles Huet.

De las tres, la primera es la que más apoyos tiene, en este momento, entre los 10 consejeros de ese grupo.

Pero Teso ha encontrado reticencias entre los vocales designados por el PP, que no olvidan que fue el nombre que el actual ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, puso sobre la mesa en febrero de 2021, cuando negociaba la renovación del CGPJ con el entonces secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea.

Aquella negociación no fructificó, pero la candidatura de Teso -que ya había sido apoyada por algunos vocales propuestos por el PSOE en 2013, cuando resultó elegido Carlos Lesmes- se ha mantenido.

En el grupo de vocales designados por el PP existe el convencimiento de que Teso "es la candidata de Bolaños". Y eso genera resistencias porque -se supone- éste es el CGPJ de la despolitización. Algunos consejeros no quieren empezar el mandato votando, precisamente, a quien el Gobierno prefiere al frente del Poder Judicial.

Además, en este grupo sostienen que "no está escrito en ninguna parte" que la futura presidenta tenga que ser "mujer y progresista". "Habrá que ver quién reúne las mejores condiciones, con independencia del género", defienden.

Los vocales designados por el PP han propuesto a un progresista, Pablo Lucas. Pero los consejeros propuestos por el PSOE reclaman para sí la facultad de determinar los nombres de los candidatos progresistas, al igual que respetan que sean sus colegas del otro sector los que decidan qué candidatos conservadores deben ir a la votación.

En este clima, en el que anoche no se había llegado a un consenso previo (que se seguirá intentando), los 20 consejeros se reunirán esta mañana para tratar de elegir a la persona que les presidirá y que estará también al frente del Tribunal Supremo.

El sistema de votación fijado, en el que se irá eliminando a los candidatos con menos apoyos en cada una de las sucesivas votaciones, facilita, por decantación, la determinación de quiénes son los más respaldados.

Pero eso no equivale a su nombramiento, ya que son necesarios 12 votos (equivalentes a los tres quintos del Pleno) y ninguno de los dos grupos los tiene por sí solos. Los vocales de cada sector pueden optar por apoyar sistemáticamente a uno de sus candidatos o incluso votar en blanco.

Algunos consejeros dudan de que hoy se llegue a un acuerdo. Otros creen que, de confirmarse ese pronóstico, sería un "mal comienzo". "Sería peor elegir a alguien que no responda a la idea de consenso", replican otros.

Las fuentes consultadas señalan que, en la hipótesis de que hoy no hubiera elección, del presidente de edad, Bernardo Fernández, volverá a convocar al Pleno esta misma semana.

La ley establece un plazo de entre tres y siete días, a contar desde la constitución del CGPJ el pasado jueves, para realizar el nombramiento.