El padre de Elisa Mouliaá sale este viernes de declarar en los Juzgados de la Plaza de Castilla./
El testigo mencionado por Mouliaá dice al juez que vio una "relación normal" entre ella y Errejón y no la notó ebria
Un amigo de la actriz que, según ésta, estaba presente cuando el exportavoz de Sumar la habría agarrado con fuerza para llevarla a una habitación declara que no vio esa escena ni notó "nada extraño".
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Fernando L., el amigo que, según Elisa Mouliaá, pudo presenciar cómo durante una fiesta el exdiputado de Sumar Íñigo Errejón la agarró "fuertemente" del brazo para llevarla a una habitación donde la habría agredido sexualmente, no ha confirmado este viernes ante el juez el testimonio de la actriz.
Fernando, que ha comparecido como testigo ante el juez que investiga la denuncia de Elisa Mouliaá, ha manifestado que la conoció a través de unos amigos suyos. En cambio, no conocía a Errejón hasta que ella le llevó como acompañante a una fiesta celebrada en casa de unos amigos de la actriz en septiembre de 2021.
El testigo ha dicho que no notó "ninguna actitud extraña" entre Errejón y Mouliaá ni ésta le dijo que estuviera incómoda. "No pasó nada trascendental", ha señalado.
Según declaró Mouliaá ante el juez Adolfo Carretero el pasado 16 de enero, ella, Fernando y Errejón estaban solos poniendo música y bailando en una parte de la casa cuando el entonces portavoz del Sumar en el Congreso la cogió con fuerza del brazo y la condujo a una habitación, donde se habrían producido tocamientos en contra de la voluntad de la actriz.
Cuando el juez le preguntó si Fernando vio cómo Errejón la agarraba y se la llevaba, la denunciante contestó que "imagino que sí".
También aseguró que ella estaba "muy ebria" -dato que no mencionó en su denuncia ante la Policía- y que por ello tiene una "laguna" por la que no se acuerda de lo que sucedió después de la supuesta agresión sexual, salvo que al cabo de unos minutos Errejón la instó a abandonar juntos la fiesta después de llamar un taxi.
El testimonio de Fernando no ha apuntalado la versión de la denunciante. Ha indicado que vio a Mouliaá "normal" y que "no la vio en ningún momento muy ebria".
Ha indicado que él bebió bastante, pero ello lo le impedía darse cuenta de las cosas y no vio que Errejón la agarrara del brazo y se la llevara. Tampoco recuerda que ambos desaparecieran.
"Como ausente"
También han declarado como testigos el hermano y el padre de Mouliaá. Este último ha confirmado que sobre las cuatro de la mañana llamó a Elisa para decirle que su hija tenía mucha fiebre y que tendrían que ir a urgencias.
El día que ratificó su denuncia, Mouliaá relató al juez esa llamada y señaló que en ese momento, tras salir de la fiesta, iba en taxi a casa de Errejón a recoger un libro escrito por éste.
El padre ha indicado que le extrañó que su hija no le preguntara cuánta fiebre tenía la niña ni hiciera ningún comentario, sino solo "sí, papa, ya voy", con una voz tenue.
El testigo percibió a Elisa "como ausente", como "ida" y él interpretó que estaba "bajo los efectos de algo".
La actriz llegó a casa de sus padres al cabo de una hora u hora y media. El padre no notó que oliera a alcohol, pero a la mañana siguiente Elisa se quejó de haberse levantado con una fuerte resaca.
Mouliaá le contó su encuentro con Errejón y que la había besado -de forma inconsentida- en el ascensor de la casa donde se celebró la fiesta. No le contó nada más "creo que por pudor", ha dicho el padre.
Ha añadido que, de haber conocido los hechos por los que su hija denunció a Errejón años después, él mismo hubiera ido el primer día a la Policía a denunciar al político de Sumar.
A quién sí contó una versión más detallada de los hechos fue a su hermano, que también ha declarado este viernes como testigo.
El juez también a interrrogado a otra testigo de referencia, una amiga de Elisa Mouliaá, que ha declarado que a los pocos días de la supuesta agresión sexual, ambas se vieron y la actriz relató pormenorizadamente lo que presuntamente sufrió.
La testigo ha explicado que Mouliaá le dijo que se sintió muy violentada y que llegó a decirle a Errejón que 'solo sí es sí'.
