Los expertos no prevén que se pueda "erradicar" la Covid-19: "Queda mascarilla para rato"
Los científicos creen que nos situaremos en un punto medio entre la eliminación de la pandemia y su control.
13 septiembre, 2021 13:26Noticias relacionadas
Está claro que las vacunas están funcionando. Sin embargo, los científicos no creen que la Covid-19 se pueda erradicar. "Es prácticamente imposible. Nos situaremos en un punto medio entre la eliminación y el control".
Así lo ha señalado Iñaki Comas, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Biomedicina de Valencia (IBV-CSIC), en el 'II Simposio Observatorio de la Sanidad: Las Lecciones de la Covid-19', organizado por EL ESPAÑOL e Invertia, y que ha dado el pistoletazo de salida este lunes.
Una lección que dejará la pandemia para todos los españoles, sin embargo, es que las mascarillas "van para rato" y que incluso han llegado para quedarse en contextos específicos, como las epidemias de gripe y los entornos hospitalarios. Esta ha sido la opinión unánime en un debate en el que han participado investigadores tan conocidos por el público como Luis Enjuanes y Adolfo García-Sastre.
Para llegar a controlar la pandemia, "necesitamos un nivel de inmunidad importante a nivel planetario". Y no solo eso, también "hay que hacer estudios sobre si es necesario una tercera dosis y crear y fomentar buenos mecanismos para llevar las vacunas a lugares menos favorecidos", ha indicado por su parte Eduardo López-Collazo, director científico del Instituto de Investigación Hospital Universitario La Paz (IdiPaz), que ha compartido escenario con Margarita del Val, viróloga e inmunóloga del CSIC e Iñaki Comas en la segunda mesa redonda del Simposio.
En esta línea, Margarita del Val ha hecho hincapié en la necesidad de "estar todos vacunados". Ha hablado sobre las posibles oleadas que vendrán y, en sus palabras, "no serán tan críticas". De hecho, "la de este verano ha ido mejor que las anteriores".
Sin embargo, "habrá que ver qué ocurre este otoño-invierno". Del Val ha avisado de que "los anticuerpos no son un marcador único para evaluar lo peligrosa que puede ser una variante. Hay que estudiar la memoria inmunitaria y la clínica (si hay una subida de casos en una población en la que antes no lo había)".
Por eso, López-Collazo ha incidido en la necesidad de hacer estudios de inmunidad celular "para determinar si es necesario una segunda dosis (en el caso de Janssen) o una tercera. Los resultados nos darán seguridad de cuándo, a quién y en qué momento volver a vacunar".
El coronavirus no pierde fuerza
Luis Enjuanes, virólogo del CSIC; Adolfo García-Sastre, director del Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes de Icahn School of Medicine Mount Sinai en Nueva York; José Ramón Arribas, especialista de Área de Medicina Interna del Hospital Universitario de la Paz (IdiPaz); y Ricardo Pujol, inmunólogo e investigador principal en Inmunología Diagnóstica del Instituto de Investigación Vall d’Hebron, han formado la tercera mesa redonda en la primera jornada del II Simposio del Observatorio de la Sanidad.
"En el laboratorio llevábamos mucho tiempo trabajando con coronavirus, ya sabíamos desde hace 35 años que vendría esta epidemia", explica Enjuanes, a quien la pandemia obligó a aplazar su jubilación. "Y esperábamos que pasaría lo que ha pasado: que el virus se fuera diseminando cada vez mejor". No obstante, el virólogo advierte que no hay señal de atenuación del SARS-CoV-2. "La patología no se ha reducido", confirma.
"Yo creo que vamos hacia una curva descendente. La finalidad del germen no es dañar al organismo, sino expandirse", ha valorado por su parte Pujol, corroborando la hipótesis de Enjuanes de una deseable atenuación del virus que nos permita convivir con él. "Yo espero que este sea el último invierno que nos dé guerra".
García-Sastre, por su parte, reflexiona sobre los problemas de EEUU para completar la pauta de vacunación."Es difícil ver cómo existe tanta enfermedad y tanta gente por vacunar en un país que fue el primero en empezar. Yo fui vacunado al final del año pasado, y se alcanzaron rápidamente altas cotas de vacunación, incluso entre niños". La politización en el discurso político y los medios de comunicación está detrás de esta actitud: aunque muchos ciudadanos estadounidenses no desconfían de las vacunas, se niegan a ponérselas porque "nadie debe decirles lo que deben hacer".
En ése sentido, Arribas ha querido citar el ejemplo de Reino Unido, que tiene tasas de vacunación muy parecidas a España, pero "no van bien", porque tras la declaración del 'Freedom Day' no existe la imposición de mascarillas en lugares públicos. "En España, nos encontramos con que el año pasado no hubo gripe ni virus respiratorios. Yo creo que en los hospitales las mascarillas deben seguir siendo obligatorias", reflexiona, especialmente en momentos como las epidemias de gripe.
Una opinión que comparte Enjuanes: "Se ha visto que la mascarilla es muy útil y no nos podemos confiar. Todavía nos queda mascarilla para rato". El virólogo explica que la lleva "siempre" en el bolsillo: "Si voy solo por el bosque me la quito, pero en un lugar concurrido, aunque sea en exteriores, me la pongo". Por su parte, García-Sastre lamenta que en EEUU varios estados hayan derogado el uso de la mascarilla pese a su demostrada efectividad para tratar de aparentar que la "pandemia ha acabado".
Los nuevos tratamientos
Los especialistas también han debatido sobre el futuro del tratamiento farmacológico de la Covid. Los anticuerpos monoclonales todavía tienen que administrarse por vía intravenosa, explica García-Sastre, "y no son accesibles para todos". Se están ensayando versiones que se administren por vía oral, pero todavía se desconoce su efectividad. "Dar con un antiviral es uno entre un millón", valora, y lo deseable es que los de nueva generación fueran "menos específicos" para la Covid y aplicables a futuros virus.
"Hemos avanzado mucho en el conocimiento del germen pero seguimos aún sin comprender bien al paciente de Covid", reflexiona Pujol por su parte. "Si queremos tratar bien a los enfermos tenemos que comprender a quién está dañando el virus, y darle antivirales, y cuáles están sufriendo por la inflamación". En ese sentido, Arribas lamenta la falta de "un gran ensayo nacional" en España en los primeros compases de la pandemia para identificar qué medicamentos demostraban mayor efectividad.
Enjuanes, por su parte, celebra la "suerte" de tener compañías que hayan dado con vacunas simples basándose en un gran avance, la tecnología de ARN mensajero. No obstante, el siguiente paso es el de obtener vacunas esterilizantes: "Si se administrasen nasalmente serían más efectivas. Necesitamos inducir inmunidad al virus respiratorio en las mucosas nasales". Aunque es una vía más arriesgada que la intravenosa por la posible afectación al cerebro, el virólogo confirma que las grandes compañías están abordando este "desafío".
En lo que coinciden los expertos es en que la pandemia debe transformar el sistema sanitario porque no se trata de preguntarse si vendrá una nueva pandemia, no cuándo lo hará. "A ningún país se le ocurre dejar de tener un ejército porque llevemos 100 años sin tener una guerra. Yo he vivido la epidemia de SIDA, he dado atención por el Ébola, y es de esperar que el sistema sanitario haya aprendido a estar preparados", concluye Arribas.
Alegato por la ciencia
"Sin ciencia no hay futuro". Por esa razón, los científicos españoles han pedido "estabilidad". Y es que, cuando llegó la pandemia, "España no tenía cimientos y se ha respondido bien gracias a un sobreesfuerzo".
Un punto en el que han estado de acuerdo todos los ponentes del bloque científico del II Observatorio de la Sanidad.
Una estabilidad con la que esperan que "los cimientos creados se mantengan para próximas crisis sanitarias", ha añadido Comas.