Norwegian alquilará aviones y pospondrá ventas por crisis del Boeing 737 Max
Copenhague, 25 mar (EFECOM).- La aerolínea Norwegian anunció hoy que alquilará aviones y aplazará la venta de modelos antiguos por la suspensión temporal de vuelos del Boeing 737 MAX ordenada por las autoridades de varios países tras el accidente mortal en Etiopía.
"La compañía ha decidido posponer potenciales ventas de 6 aviones Boeing 737-800 y usar la capacidad de los 787 Dreamliner disponibles en rutas muy solicitadas para añadir flexibilidad. Y está preparando un 'wet leasing' (alquiler de flota y tripulación) para cubrir el déficit de capacidad restante", consta en un comunicado.
La aerolínea noruega resaltó que intenta combinar vuelos y relocalizar aeronaves para mantener el número de cancelaciones en el mínimo y reducir el impacto en sus clientes.
Norwegian mantiene contactos continuos con las autoridades de aviación europeas y sigue sus instrucciones y recomendaciones, además de sostener un "buen diálogo" con Boeing; y confía en alcanzar "un acuerdo constructivo" con el gigante de la aeronáutica estadounidense.
La compañía escandinava anunció hace dos semanas que pediría una compensación económica a Boeing por las pérdidas ocasionadas por la suspensión temporal.
"Hay muchos que se preguntan cómo va a afectar esto a la situación financiera de Norwegian. Se trata de aviones completamente nuevos, así que esa cuenta será para el fabricante", afirmó en un videocomunicado el pasado día 13 su director ejecutivo, Bjørn Kjos.
La tercera aerolínea de bajo coste en Europa, que el año pasado transportó a 37 millones de pasajeros, dispone de 18 aviones 737 MAX, que usa en sus rutas transatlánticas entre la costa este de Estados Unidos y Gran Bretaña e Irlanda.
Los Boeing 737 Max permanecen vetados por muchos países por las dudas surgidas tras dos accidentes, uno en Etiopía este mes -en el que murieron 157 personas- y otro en Indonesia el pasado octubre, en el que fallecieron 189.
Aunque no se conocen todavía las causas de los siniestros, las investigaciones apuntan a que podrían deberse a fallos en un software diseñado para mejorar la seguridad en la fase de ascenso de los aparatos o en los sensores que activan ese mecanismo.