Justo dos meses después de que el Ministerio de Trabajo cerrase el acuerdo correspondiente con sindicatos y patronal, el Consejo de Ministros ha aprobado la 'Ley Rider'. Es decir, el real decreto-ley que modifica el Estatuto de los Trabajadores y que obligará a plataformas digitales de reparto como Glovo a contratar a sus repartidores en un máximo de tres meses. Es decir, que para mediados de agosto tienen que estar contratados.
Según indican fuentes de Trabajo, la aprobación de la 'Ley Rider' se ha dilatado en el tiempo para poder cerrar a tiempo todos los detalles técnicos que la acompañan.
Además, en este caso, en el Gobierno han querido mimar con detalle esta legislación puesto que va a ser la primera de su tipo en la Unión Europea. En esta ocasión, España es pionera a escala internacional.
"Es una norma que va a cambiar el signo de los tiempos. No hay ningún país en el mundo que se haya atrevido a legislar en esta materia", ha indicado Yolanda Díaz, vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de ecste mares.
En este sentido, ha anunciado la creación de un comité de expertos que "no solo van a asesorar el Gobierno sino que van a estudiar el bueno uso de los algoritmos y de la inteligencia artificial en las relaciones laborales". "Ahora los algoritmos se van a poner a favor de la mayoría social", ha aclarado.
Supremo
Cabe recordar el reglamento está en línea con lo que dictó el Tribunal Supremo en septiembre de 2020, en la que establecía que los repartidores son trabajadores por cuenta ajena y no autónomos.
Además, según indica el texto aprobado por el Consejo de Ministros, "la representación legal de los trabajadores deberá ser informada de las reglas que encierran los algoritmos y los sistemas de inteligencia artificial que pueden incidir en las condiciones laborales por las que se rigen las plataformas, incluyendo el acceso y mantenimiento del empleo y la elaboración de perfiles". Esto afectará a todas las plataformas digitales, no solo a las de reparto.
Glovo y Deliveroo
Esta norma se tendrá que cumplir "para todos los ámbitos". Es decir, que la condición de compartir los algoritmos o el funcionamiento de los sistemas de inteligencia artificial tendrá que ser cumplida por todas las plataformas digitales, no solo las de 'riders'.
Por otro lado, en el caso de las plataformas de 'riders' (tales como Glovo, Deliveroo y Uber Eats), "se reconoce la presunción de laboralidad para los trabajadores que presten servicios retribuidos de reparto a través de empresas que gestionan esta labor mediante la gestión algorítmica del servicio o de las condiciones de trabajo, a través de una plataforma digital". Es decir, que todos los 'riders' serán asalariados salvo que se pruebe lo contrario.
El anuncio de estas nuevas normas ha tenido sus efectos en el campo empresarial. Las plataformas digitales de reparto han criticado a la CEOE por el texto acordado. De hecho, Glovo ha decidido abandonar la patronal.
Las plataformas digitales de reparto critican a la patronal que no haya defendido sus intereses durante la negociación del Diálogo Social y que haya firmado un acuerdo sin su consentimiento. Glovo y Deliveroo indican que ninguna de sus propuestas fue admitida en las negociacione y que la nueva ley les perjudica notablemente.
Según estas plataformas, la 'Ley Rider' podría generar la reducción de hasta un 70% de los actuales puestos de trabajo, 250 millones de euros en pérdidas a los restaurantes y, lo que es peor, que estas empresas dejen de prestar servicio en las pequeñas ciudades donde ya no será rentable operar por la nueva normativa.
Ciudades pequeñas
Fuentes de estas plataformas con las que ha hablado Invertia, indican que no hay todavía un baremo oficial del número de habitantes de las ciudades que podrán tener servicio de Glovo y Deliveroo, pero admiten que estamos entre una horquilla de los 150.000 y los 100.000 habitantes.
En España solo existen 43 ciudades por encima de los 150.000 habitantes y 63 por sobre los 100.000. En estos momentos, compañías como Deliveroo reparten en más de 75 ciudades y Glovo lo hace en más de 100, por lo que esta nueva normativa reduciría su área de influencia en al menos la mitad de los emplazamientos actuales.